La historia de Alejandro Reyna no es nueva. El hombre, tanguero de alma perdió su trabajo y su inestable situación económica lo llevó a vivir en la calle en donde se mantuvo como pudo, vendiendo cosas y cantando tangos.

Hace algunos meses y gracias a un video grabado por un policía cuando Reyna cantaba en un bar, le llegó la posibilidad de firmar un contrato con Sony para grabar sus éxitos ovacionados en casa esquina.

Entrevistado por Daniel Tejada en Banda Ancha, Reyna comenzó diciendo: “Es muy difícil acá en Argentina vivir del tango, hay una movida más relacionada con el baile pero no con el canto”, manifestó.

“Y todos los tangueros además tenemos que tener otro trabajo. Yo tenía uno, no registrado en un frigorífico y luego de un tema de salud, cuando me quiero reincorporar a la semana, me encuentro con que mi trabajo estaba ocupado por otra persona”, dijo sobre su actividad previa.

Esta decisión le trajo varias problemas a Reyna quien debió mantenerse sólo cantando los fines de semana, recurso que se detuvo de pronto cuando la pandemia por el coronavirus obligó a cerrar todo y terminó viviendo en una camioneta en la calle.

La situación cambió cuando Reyna se volvió popular y muchos reconocieron su talento como cantante de tango: Me llamó Damián Amatto, el presidente de Sony Argentina y él fue muy sincero conmigo, parece que el video había llegado a Estados Unidos y allá me vieron cantar los directivos de la disquera y Tony Motola –marido de Thalía- quien ordenó a las autoridades del país contratarme”.

Antes de finalizar el contacto virtual, el artista prometió visitar San Juan para acercarse a sus fanáticos de Cuyo y seguir haciendo lo que ama.