Más allá de todas las reacciones que generó en el mercado de la series de plataformas como Netflix, El Amor Después del Amor, que cuenta la vida de Fito Páez, para muchos  fue como una conexión con lo que vivimos en los años 90, redescubriendo a Fito Páez, con el boom del álbum el Amor Después del Amor.

Los 8 capítulos tocan la sensibilidad, visto desde ese punto de vista, como escribió alguien por ahí;  la crítica la dejamos para los especializados, pero sin duda que en muchos tocó alguna fibra y por eso tiene la repercusión que tiene hoy esta nueva propuesta, que aparte está aprobada por su protagonista, como suele suceder con este tipo de trabajos.

Los amantes del Rock Nacional obviamente ya teníamos antecedentes de este gran músico. En mi caso recuerdo temas como fueron: 11 y 6, Cable a Tierra, Giros, Yo Vengo a Ofrecer Mi Corazón, Polaroid de Locura Ordinaria y tantos otros que el de grandes anteojos de color ya había publicado y nos conmovían.

El nombre de la serie es El Amor Después del Amor (disco publicado en el año 1992), justamente  fue el trabajo que masificó a Fito y sonó en las radios del mundo, ya no era solo para pocos, y San Juan no fue la excepción.

En el marco de la Gira “La Rueda Mágica”, quienes ya se acercan a los 50 años de edad, se acordarán que este verdadero monstruo llegó en esa época con su recital al mítico Estadio Aldo Cantoni del Parque de Mayo. Muchos aún lo recordamos.

Hicimos lo que pudimos para conseguir el dinero de los tickets. Había otra posibilidad;  participar de algún concurso para poder ganarse uno, pero eso era casi imposible, en la desaparecida FM Excelencia, donde una de sus figuras era el Gringo de Lara.

Así fue como quedamos enmudecidos ante el show en el Cantoni.  El Amor Después del Amor era el primer tema que ponía en escena a Fito haciendo estallar al público. En ese momento quien hacía los coros era la gran Claudia Puyó y el primer guitarrista de la banda fue Gabriel Carámbula, sin dudas todo derroche de talento sobre el escenario del rock.  En mis 20 años hasta entonces creo que no había visto algo igual.

Después Fito volvió a San Juan pero ese momento en el Estadio fue mítico, único para muchos. Seguramente tuvo que ver con el esplendor del rosarino que queda plasmado en los capítulos de la serie.

Cuando saltó del Luna Park a los estadios, y a exigir al mánager con el cual se reconcilió que concediera lo que él pidió, lujos y organizaciones de un auténtico Rock Star.

Así a través de la serie uno puede rememorar varios momentos, instantes de la juventud, cuando andábamos por los 20 años, más allá de repasar la vida  de uno de los artistas  imprescindibles a la hora de hablar de nuestra música.

En las redes se multiplican los testimonios de quienes la vieron, manifestaron la emotividad, el llanto, otros, opinan desde lo técnico, el parecido y la calidad de los actores. Los comentarios positivos se multiplican para la biopic que es sensación en este momento.