El futuro de la Escuela de Música hoy depende de la actitud que asuma el nuevo gobierno, a cargo de Alberto Fernández, en materia de infraestructura universitaria. Mientras tanto, la UNSJ ya presentó una carpeta con toda la documentación para esperar a las nuevas autoridades con el planteo urgente. Así lo afirmó en Banda Ancha el secretario de Obras, Jorge Cocinero, quien también deslizó una crítica sutil al diseño del proyecto.

"Hemos presentado toda la carpeta para apenas tengamos prácticamente las nuevas autoridades que van a llevar adelante la parte infraestructura universitaria, podamos tener una respuesta prioritaria, dada la cantidad de tiempo que llevamos con esto", señaló Cocinero.

Luego abordó la cadena de responsabilidades por la frustración que hoy determina que docentes y alumnos de la Escuela de Música deban peregrinar por una docena de diferentes locaciones, todas prestadas.

"Yo creo que acá han habido muchos factores. Esta es una obra que se viene gestionando desde 2007, cuando estaba Kuchen. Se llamó a concurso nacional, ganó un estudio de arquitectura de Buenos Aires. Es una obra muy linda desde el punto de vista arquitectónico, morfológico", reconoció Cocinero. 

Pero advirtió que "quizás" tenga "demasiados detalles" que la hayan convertido en una obra de infraestructura "quizás demasiado onerosa para un país como el que nosotros tenemos".

"Esto tuvo varias eventualidades", reconoció el funcionario universitario. Recordó que recién se consiguió el financiamiento para licitar en 2013 y la empresa ganadora, llevando un 40% de avance, paralizó las tareas y abandonó todo. Luego vinieron dos licitaciones más. La primera quedó desierta y la segunda contó con una sola oferta, 52% por encima del presupuesto oficial. Inviable.

"Tengo que aclarar que de todos estos montos, nunca hemos tenido el dinero físico nosotros. Todo esto lo ha hecho siempre la Nación y es la Nación la que ha pagado las certificaciones a la empresa directamente. Ni siquiera a través de la UNSJ", aclaró finalmente Cocinero.