Florencia Millón: “La resina me permite encapsular y conservar los recuerdos”
La artesana habló con Diario 13 San Juan sobre su trabajo, que vincula el arte con el merchandising.
Nuevamente llega a la columna de los sábados una “Mujer Activa” para hablar de su arte. En esta oportunidad, Florencia Millón comenzó la entrevista hablando de sí misma: “Soy Florencia tengo 43 años, dos hijos Paloma de 13, Joaquín de 9 y Simón de 20, hijo de mi pareja. Trabajo hace 25 años con resina haciendo pines, imanes, calcomanías de resina (Domes), llaveros, medallas, y diferentes objetos siempre con ese material. Comparto mi vida y taller con mi pareja, Eric Nobre, hace casi 17 años”.
“Como buena escorpiana soy muy apasionada, inquieta, laburadora y bastante extremista. Disfruto mucho de mi trabajo en el taller, al punto de trabajar incluso los domingos y feriados. Soy muy observadora y sensible (me afecta e influye muchísimo lo que ocurre a mi alrededor). Soy muy sociable, me encanta compartir con familia y amigos (prefiero mil veces juntarme en una casa que salir, aunque cuando lo hago lo disfruto también). Me encanta conocer gente nueva, aunque conservo mis amigos de toda la vida”, dijo la entrevistada sobre su personalidad.
Luego agregó: “Soy deportista, juego al tenis (que era mi deporte en la infancia y retomé de grande) y ahora también voy al gimnasio. Es mi momento de desenchufe y cable a tierra. Soy súuupeeer ansiosa (reconozco que es un defecto, sobre el que estoy trabajando mucho en mi terapia”, aseguró Florencia.
Disfruto mucho de mi trabajo en el taller, al punto de trabajar incluso los domingos y feriados.
Acerca de su trabajo artístico, la entrevistada comentó: “Me gusta decir que soy artesana y emprendedora. Empecé pintando anillos con resina y creando accesorios de moda femenina. Después fui incorporando imágenes a los productos, lo que me permitió abrirme al mercado del merchandising a través de pines, imanes llaveros, calcos, medallas, reconocimientos deportivos, entre otros objetos. A veces trabajo sobre imágenes y logotipos creados o diseñados por mis clientes, muchos de ellos profesionales relacionados con la industria gráfica”, comentó.
En la actualidad, la artista trabaja en la obra “Los besos que NO dimos en pandemia” y que consiste en la impresión de labios pintados para representar los besos: “Voy cubriendo esos registros con resina transparente, como una manera de fijar esa imagen en el tiempo. Este proyecto, es una manera simbólica de atesorar un hecho tan efímero como la representación del amor a través de un gesto que dura una fracción de segundo, en un intento por preservarlo del paso del tiempo”, comentó la artista sobre su obra en proceso.
“Es una forma de poner en valor la expresión física del afecto, algo que estuvo prohibido durante la cuarentena del año 2020, por el miedo social al contagio del COVID 19. Así mismo mi obra intenta dotar de materialidad física algo absolutamente incorpóreo e invisible como el amor, valiéndome de la sutileza efímera del beso como recurso simbólico y la imagen que imprimen los labios de una persona al besar, en contraposición a la virtualidad de las relaciones afectivas en plena pandemia”.
Por otro lado y desde un punto de vista más comercial, la emprendedora desarrolla productos turísticos para Mendoza y en San Juan, creó una línea a partir de las ilustraciones de la artista Luciana Asandri. Además, medallas y reconocimientos para estudiantes y egresados: “Para el Museo Provincial de Bellas Artes Franklin Rawson, realizo diseños de objetos, con fragmentos de imágenes reproducidas, de las obras de la colección permanente del museo y también, de obras de artistas contemporáneos. Esto es algo que empecé a hacer hace años y me encanta”, aseguró Millón.
Me gusta decir que soy artesana y emprendedora. Empecé pintando anillos con resina y creando accesorios de moda femenina.
La quietud y el encierro de la pandemia no detuvieron a esta “Mujer Activa” quien, junto a la diseñadora Clari Cortés, crearon una marca de etiquetas para frascos de cocina y otros objetos de diseño.
“En mis ratos libres, en el taller, me gusta experimentar con flores, hojas, partes de frutas y verduras (me fascinan sus formas y colores) y con ellos hago diferentes objetos. También realizo diversas experiencias difíciles de clasificar que me permiten seguir innovando y avanzando con la técnica”.
En su rol de madre, artista y emprendedora, Florencia contó el modo en el que logra conectar todas sus actividades: “Puedo hacerlo, es fácil porque soy mi propia jefa y manejo mis horarios. Al tener el taller en el fondo de nuestra casa, puedo cortar mi actividad laboral en cualquier momento para cocinar, llevar y traer a los chicos, y hasta armar algún llavero o embolsar productos mientras ellos hacen sus tareas”.
Mi obra intenta dotar de materialidad física algo absolutamente incorpóreo e invisible como el amor.
Al hablar de su pareja, el artista Eric Nobre, Florencia comentó: “Eric es un papá muy muy presente y dedicado. Él es quien les Lee cuentos a los chicos de noche. Entre los dos, ayudamos con las tareas escolares, intentamos repartirnos la carga para que cuando uno está apretado con algún laburo, el otro lo cubra y viceversa. Además, nos gusta compartir en el taller con los chicos que aprenden las diferentes técnicas, por ejemplo, Joaquín se la pasa inventando y Paloma ya soldó sus primeras joyas en alpaca. Hasta ahora es todo un juego, porque son chicos todavía”, aseguró Florencia.
Logrando unir y vincular de una manera única, su arte y las necesidades del mercado a través del merchandising, Millón recordó: “En el año 2015 y gracias a una beca de la Fundación del Banco San Juan pude hacer unas obras en donde logré unir mi idea de collares y objetos, con fragmentos de obras de artistas que admiro”.
Para finalizar la entrevista y con la mirada puesta en el futuro, Florencia aseguró: “Deseo tener mucho tiempo y salud para poder seguir laburando de esto que me encanta y desarrollar una línea de objetos atemporales y únicos, siempre teniendo en cuenta que la resina permite encapsular y conservar los recuerdos”.