Cuando la cuarentena por el coronavirus obliga a hacer una pausa obligada en nuestros proyectos, Marta Minujín le hace frente a la situación y, apostando a su pasión por el arte presentó en su cuenta de Instagram un cuadro llamado “Pandemia” y recordó que tiene serias intenciones de “acostar a la estatua de la Libertad en Nueva York”.

La novedad de la artista por estos días es montar una gigantesca pelota de 15 metros de diámetro cubierta en dulce de leche.

Sobre esta última idea Minujín comentó: "Será como comerse el mito argentino que es el fútbol, pero con dulce de leche, que es un invento nacional".

La incansable Marta Minujin: ahora apuesta en una pelota de dulce de leche

A través de las redes sociales la artista argentina propone un juego entre lo efímero y la permanencia, la aparente superficialidad, la transformación conceptual de los recorridos posibles de lugares emblemáticos, así como los mitos universales a ser derribados para construir nuevos, es parte de la gran apuesta vital.


Por estos días, la artista alterna su firma en la propuesta de Artistas visuales autoconvocados, su recuerdo de Christo, el artista búlgaro que murió este año, a quien define como su "hermano en el arte imposible y el gigantismo delirante siempre fiel a sus ideas", la reproducción de su intervención de un día en la cuenta del Malba, y los avances de su trabajo actual, que invita a recorrer.


Su nueva creación se llama "Pandemia", un cuadro grande -como el resto de sus obras- pero esta vez sin los habituales colores flúo que utiliza desde 1965. El nombre de la propuesta es un reflejo de lo que se está viviendo: acostumbrada a usar "miles de colores -sostiene- esta obra es "a única que va a terminar siendo negra, todo influenciado por lo que pasa, por la situación".

"La Menesunda" en Liverpool

La incansable Marta Minujin: ahora apuesta en una pelota de dulce de leche
pandemia "La Menesunda" (1965 ) en el Tate de Liverpool (Inglaterra), 27 de julio 28 de octubre "Posiblemente se haga en abril la Menesunda si es que no viene otra pandemia por la que tengan que volver a cerrar los museos. Está programada y toda armada para que se haga. Se hace, a no ser que venga una catástrofe mundial",
La incansable Marta Minujin: ahora apuesta en una pelota de dulce de leche

Acostar la estatua de la Libertad

En referencia a su proyecto de acostar la estatua de la Libertad, cuenta que la invitaron a hacer una exposición en el Jewish Museum de Nueva York, museo ubicado en la 5ta avenida, frente al Central Park, en 2022.

"Todo es posible -dice-, porque mi arte es un arte imposible, pero al final termino haciéndolo después de unos años. Así como acosté el Obelisco (1978) o hice el Pan Dulce (1979), siempre hago proyectos increíbles. Va a ser como el Lobo marino de Mar del Plata (2014). La estatua de la Libertad acostada, en estructura de hierro en donde van adosadas hamburguesas, como te las dan en los restaurantes, bares, pero de plástico. Todo imitación hamburguesas, miles y miles, como 50000 hamburguesas, pero de plástico por lo que puede llover, puede pasar de todo".

"La idea es acostar el mito con la idea nacional de ese país, por eso la hamburguesa, porque es típica de los norteamericanos", explica y acota que se encuentra en busca de financiamiento para esta obra.

Como en el caso del Lobo Marino de Alfajores, que montó frente al Museo de Arte Contemporáneo (MAR) en Mar del Plata: "La gente arrancó los alfajores" -el envoltorio del alfajor inflado con aire comprimido- y esas 35000 cubiertas fueron canjeadas por alfajores verdaderos", evoca.

A diferencia de otros eventos efímeros, la estructura del Lobo marino fue luego recubierta de alfajores de aluminio anodizado, siendo "la única obra que quedó porque todas las otras se las llevó el público, se las comió", acota.

"Mi obra de arte efímera se convirtió en eterna (Mar del Plata, 2014)", consigna. Con la estatua de la Libertad, ya no será posible la permanencia en el tiempo: "La voy a tener que sacar porque no me van a dar permiso para más tiempo, pero va a estar acostada, va a ser arte efímero. Pero lo voy a hacer", se entusiasma.

La incansable Marta Minujin: ahora apuesta en una pelota de dulce de leche
pelota de fútbol recubierta de dulce de leche "Una pelota gigante de 15 metros de diámetro, y que grúas gigantescas jueguen al fútbol, se la pasen de un lado a otro, mientras la gente mira y después la depositen en una plataforma. Pelota recubierta de dulce de leche sólido para que la gente se lo lleve y se lo coma. Es como comerse el mito argentino que es la pelota de fútbol, pero con dulce de leche que es un invento nacional".

Ante la pregunta ¿por qué acostar al mito?, Minujín explica: "El mito es consumido por la gente para crear nuevos mitos. Por ejemplo, la gente va a París y se sube a la tour Eiffel, en Nueva York la estatua de la Libertad, en Pisa a va a la torre de Pisa, al Arco de Triunfo en París. Ahora que estamos en el siglo XXI deberíamos ser capaces de crear nuevos mitos universales, pero no seguir con estos".

Y propone: "A lo mejor sería un cohete gigante, como el cohete que va a la luna, en vez del obelisco. Tenemos que inventar, en la era digital, con rayos láser; un arcoiris al revés, rayos láser gigantes que sean un monumento de luz sólo. Incorporar toda esta tecnología a lo ganado en estos siglos de progreso -se explaya-. No puede ser que todavía vayamos a Egipto a ver las pirámides, a Grecia a ver el Partenón, por eso hay que inventar nuevos mitos, del tercer milenio".