Daniela Aza es hoy una influencer de Capital Federal, pero esto no fue algo que nació de la nada sino que ella lo buscó porque ella planifica cada uno de los objetivos y busca pasar todas las metas que se propone. Daniela con sus 36 años vivió miles de adversidades pero ninguna la derribó. Por eso es que se animó a contar su historia en DIARIO 13 SAN JUAN. 

Daniela nació con Artrogriposis Múltiple Congénita (AMC), se trata de un síndrome neuromuscular que afecta a una de cada tres mil personas. Entre otras complicaciones esta condición afecta a las articulaciones, generando contracturas y malformaciones en miembros inferiores y superiores. 

En la actualidad con su titulo de Licenciada en Comunicación de la UBA en mano, se dedica a “inspirar, motivar y educar” con su historia. Es así como adoptó un rol que es recurrente en las redes pero con un plus por su mensaje. Es que ahora se autodefine como la “influencer de la inclusión”.

¿Cuáles fueron los principales obstáculos en tu educación?

Lo cierto es que cuando cursé la carrera se hablaba mucho menos de discapacidad e inclusión sumado a que para las personas con discapacidad es sumamente difícil estudiar una carrera universitaria por falta de transporte accesible, barreras arquitectónicas, falta de apoyo e inclusión laboral que pueda brindar el ingreso económico para sostener esa carrera. En mi caso era muy difícil movilizarme, me encontraba con inconvenientes derivados de falta de accesibilidad, atrasos a nivel burocrático que me generaba largas filas y tener que pedir prioridad, fallas del ascensor entonces debía subir la escalera y había mucha indiferencia ante esto. 

¿Cuál fue tu objetivo y cuál es hoy a la hora de ser comunicadora ?

La realidad es que los objetivos siempre van cambiando a lo largo del tiempo. Si bien siempre sentí la necesidad de hacer valer los derechos de las personas con discapacidad, uno no se imagina haciéndolo a través de las redes sociales. Hoy esto es algo real porque las redes sociales nos dan la posibilidad de llegar a mucha gente y cambiar miradas. Usarlas para mejorar el mundo y dejar una huella creo que es uno de mis objetivos. Visibilizar para que las personas puedan salir de la zona de confort y pensar otras formas de ser y estar en el mundo. Hoy en día, la discapacidad sigue siendo catalogada como algo malo, un problema y es hora de que se perciba desde la diversidad. Siento que la única manera de cambiar eso es educando y visibilizando aquello que no se ve y no se habla.

¿Crees que hay tabúes respecto a la discapacidad ?

Las principales barreras en torno a la discapacidad tienen que ver con los tantos tabúes que existen sobre ella. La misma discapacidad es un tabú y se le tiene miedo a nombrarla por eso surgen tantos eufemismos como “capacidades diferentes”. Principalmente una perspectiva que tiene que ver con la falla, la deficiencia. Se piensa a la discapacidad desde la enfermedad y no desde la diversidad. Y esto genera que no se hable y no “garpe” porque somos “pobrecitos”. Entonces la sexualidad y pareja, la moda, la maternidad, el trabajo, en todos los ámbitos en donde  las personas tienen un lugar, las personas con discapacidad no lo tienen y son excluidas o estigmatizadas. Parece que no podemos acceder a todo eso que las personas “normales” sí. Es como si no existiéramos y ni siquiera consumiéramos productos por eso no estamos presentes en publicidades todo lo que tendríamos que estar. Por ejemplo las mujeres con discapacidad seguimos ausentes en muchos mensajes que tienen que ver con la belleza, productos dirigidos al público femenino.  La discapacidad no está aún naturalizada en la sociedad y sigue siendo para la sociedad algo que necesita una cura. Sin embargo, lo que necesitamos es aceptación, empatía, eliminación de obstáculos y barreras y participar libremente de todos los ámbitos de la sociedad como cualquiera. 

¿Qué es lo principal que querés desmitificar? 

En primer lugar, que la discapacidad no es algo malo. Es una circunstancia y característica como puede ser cualquier otra. Forma parte de la diversidad a la cual tanto queremos aspirar. Quienes la atravesamos somos personas y, con un entorno y apoyos que lo permitan, podemos hacer muchas cosas y tener una vida plena. Somos mucho más que diagnósticos. 

¿Cuesta encontrar espacios para dar a conocer temáticas correspondientes a la discapacidad?

Un montón. Si bien hay avances lentos la sociedad todavía no está acostumbrada a que le hablen de discapacidad y todavía no es algo que “venda” por ejemplo para marcas pero es hora de cambiar esto para que realmente exista igualdad de oportunidades. 

¿Cuáles son tus proyectos a futuro ?

Hoy mis redes se convirtieron en un trabajo que lleva tiempo y esfuerzo pero vale la pena cuando veo los resultados. Me gustaría que este proyecto siga creciendo y tener más apoyo para sostenerlo y llegar a más gente desde mi experiencia y vivencias. Siempre está el proyecto de escribir un libro y brindar más charlas para seguir inspirando, motivando y educando.