La llegada de la pandemia por el coronavirus, activó manera de comunicar y educar jamás imaginadas y es el caso del bandoneonista Mariano Godoy y del productor Sebastián Barbui que, motivados por la necesidad de generar una alternativa para las personas interesadas en el bandoneón, crearon una manera de enseñanza particular.

"Los sistemas de enseñanza relacionados únicamente con el tango y el valor excesivo para un instrumento de estudio alejan a los jóvenes del bandoneón" comenzó diciendo Mariano Godoy en referencia a una de las causas del proyecto.

Bandólica se define como un dispositivo para aprender a tocar el bandoneón, complementado con un sistema de aprendizaje: está conformado por un instrumento portátil e interconectable con otros dispositivos vía USB que sólo necesita de una computadora con acceso a internet para empezar a sonar. A través de la página web bandolica.com se puede acceder a diferentes estilos y tipos de sonido de bandoneón, informaron los autores.

Además, Bandólica crea la adaptación del bandoneón dentro del mundo de los dispositivos digitales. Los inventores esperan que en el futuro Bandólica pueda ser utilizada no sólo como un dispositivo pedagógico sino también como un nuevo instrumento.

Proyecto Bandólica: un acercamiento al mundo del bandonéon

El proyecto se creó durante la pandemia, lanzando una primera producción de 50 unidades con el fin de comercializarse como un emprendimiento boutique, pero la demanda superó ampliamente las expectativas dejando entrever que existe una gran cantidad de personas interesadas en el estudio de bandoneón en el mundo entero.

“Sabemos que bandólica es un invento revolucionario, es un descubridor de talentos" manifestó Sebastián Barbui sobre la idea.