Clausuraron la Bombonera para allanarla por el aforo en Boca-Lanús
Las autoridades pertinentes buscan pruebas para establecer si en el partido del sábado se superó el máximo de espectadores permitidos.
La vuelta de los hinchas a las canchas sigue dando que hablar y preocupa a las autoridades sanitarias argentinas. En este caso, luego del encuentro que disputaron el sábado Boca-Lanús, la Bombonera fue clausurada. La idea de la fiscal Celsa Ramírez, a cargo de eventos masivos, es recolectar pruebas que permitan establecer si en el partido se superó el aforo permitido.
Por tal motivo, en vez de solo ser allanada, la fiscal decidió que debía clausurarse por cinco días. El Ministerio Público Fiscal y la Policía Judicial estuvo en el lugar secuestrando pruebas, entre molinetes, cámaras de seguridad y documentación, que permitan esclarecer si se superó el aforo máximo permitido en el partido del sábado por la Liga Profesional.
Con 26.500 lugares habilitados (el 50 por ciento de la capacidad total), quedaron dudas sobre la cantidad de público que dijo presente en La Boca, al comparar las populares cerca del máximo y las plateas con claros. Por ello, se abrió de oficio la investigación por "exceso de concurrencia y omisión de recaudos", mientras que la dirigencia Xeneize asegura que ni siquiera se llegó al tope permitido, estimando que se cubrió solo el 46 por ciento.
Esta vez, para asegurar que no se pierdan elementos de prueba, el allanamiento trajo consigo una clausura preventiva por cinco días, tal como sucedió con Nueva Chicago. A River, en cambio, se lo intimó a presentar más pruebas en 48 horas.
Así, La Bombonera se suma a las imputaciones que sufrieron por violación del decreto presidencial y resistencia a la autoridad los dirigentes de River tras el Superclásico y los de Vélez por su duelo con Independiente, más las investigaciones a Nueva Chicago por el acto proselitista del presidente Alberto Fernández, y nuevamente al Monumental por Argentina - Uruguay por las Eliminatorias Conmebol. En este último caso, como en Boca, también se investiga la existencia de entradas adulteradas.