Una fuerte noticia conmocionó al mundo River en la tarde del martes. Miguel Borja, el goleador del equipo de Marcelo Gallardo, y su pareja, Linda Pérez Martínez, fueron denunciados ante la Policía luego de que se identificara un presunto maltrato físico a sus hijos, de 7 y 10 años.

Sin embargo, tras una entrevista entre el futbolista colombiano, la madre de los chicos y el gabinete de Servicio Local y Niñez de Canning, a cargo de la Licenciada Laura Arnal, se constató que "los niños no sufren violencia" de parte de sus progenitores, según fuentes policiales.

La directora del Instituto Grilli de Canning, Valeria Goluza, elevó la denuncia a las autoridades por la mañana para que comenzaran el proceso averiguación del ilícito.

Todo se desencandenó porque uno de los chicos, el de 7 años, mostró actitudes extrañas y contó situaciones domésticas durante una de las clases, que alertaron a las maestras sobre la posibilidad de que estuviesen sometidos por sus padres a algún tipo de maltrato físico. Después, las profesoras notificaron a la directora, quien habló personalmente con el nene para escuchar su versión. Ahí resolvió radicar la denuncia en la fiscalía especializada en violencia familiar de la localidad de Ezeiza, liderada por la fiscal María Lorena González, que abrió la causa y la investigación.

No obstante, tras dos entrevistas realizadas por el gabinete de Servicio Local y Niñez -a cargo de la Licenciada Laura Arnal-, una al delantero y su pareja y otra a los menores, se determinó que "ninguno de sufre violencia de sus padres". Tampoco se constataron lesiones. La fiscal dispuso que los chicos regresen junto a Borja y Martínez a su hogar y todavía analiza si la causa seguirá en curso o se archivará.

La dirigencia del Millonario todavía no se expidió públicamente sobre el tema. Fuentes cercanas a Núñez deslizaron que lo sucedido, pese a no haber avanzado a un proceso judicial más profundo, cayó como un balde de agua fría.

Por otra parte, el plantel, cuyo grueso recién volverá a practicar el miércoles en el predio de Ezeiza, no tenía conocimiento previo de la situación. Muchos hinchas de la Banda conocían a los hijos de Borja porque habían salido con él al césped del estadio Monumental en reiteradas veces.