El Comité de Seguridad de la Ciudad publicó un comunicado con los detalles del operativo para el duelo entre Boca Juniors y River Plate, a partir de las 16 en La Bombonera. El Superclásico contará con 1.300 efectivos policiales distribuidos en tres anillos de protección.

A partir de las 8 de la mañana se comenzarán a cortar las calles en la inmediación del estadio y, de esta manera, favorecer el tránsito de los hinchas del Xeneize. A su vez, las puertas del estadio Alberto José Armando se abrirán a las 12 del mediodía, cuatro horas antes del pitido inicial de Nicolás Ramírez, autoridad del duelo.

Dentro de los 1.300 efectivos involucrados en el amplio operativo, habrá policías de la Ciudad, cadetes del Instituto Superior de Seguridad Pública, quienes trabajarán en el programa Tribuna Segura, Agentes de Tránsito, fiscalizadores de Espacio Público e inspectores de la Agencia Gubernamental de Control (AGC).

Los micros que trasladarán a la delegación de River serán escoltados desde su concentración en el hotel ubicado en Puerto Madero hasta La Bombonera. Finalizado el partido, también serán acompañados por móviles policiales.

Una de las particularidades que tuvo que poner el Comité de Seguridad encima de la mesa a la hora de discutir el parte policial es que el día del partido se desarrollará el día de la primavera y, por ende, habrá mucha más gente en las calles que lo normal para resguardar. A su vez, ambas hinchadas realizarán su característico banderazo para alentar a sus planteles y solo habrá 18 cuadras de diferencia entre uno y otro.

En las adyacencias al estadio se hará hincapié en el control de las calles para evitar que se instalen “trapitos”, la venta ilegal y la reventa de entradas. En caso de encontrar alguna persona en una maniobra ilícita, se le hará una contravención y será incluida en el padrón de Tribuna Segura para evitar que pueda ingresar a los estadios de fútbol. El operativo de seguridad finalizará una vez que los planteles e hinchas se retiren del estadio.

El cuadro de Marcelo Gallardo está en el hotel Hilton de Puerto Madero mientras que el de su par, Diego Martínez, espera en el Intercontinental antes de emprender viaje al estadio. Los dos están ubicados en la misma zona y, más allá de la distancia entre uno y otro, la fuerzas de seguridad estarán pendientes de que no ocurra ningún tipo de altercado en caso de que se crucen ambas parcialidades. Es por esto que no solo se verán calles cortadas en la zona de la cancha, sino que también se podrán encontrar los cercos en ambas concentraciones para resguardar y controlar a la multitud que se acerque a los alojamientos.