El día que dos suecas revolucionaron las calles de San Juan
Se trata de Ewy Rosqvist y Úrsula Wirth, dos corredoras que ganaron el Gran Premio de Turismo Standart en 1962 y que serán homenajeadas a través de un documental bajo la dirección de su compatriota Milla Bergh y dos realizadores cinematográficos sanjuaninos.
Corría el año 1962 y un hito en la historia del deporte automotor se escribiría en el Gran Premio de Turismo Standart, al ser ganado por dos corredoras suecas, que compitieron para Mercedes-Benz y fueron dirigidas por Fangio. Ellas, se aventuraron a competir en las difíciles rutas Argentinas, contra el machismo reinante en la época, en el deporte.
Ewy Rosqvist, de 32 años a cargo del volante y Úrsula Wirth, de 29 quien fuera su copiloto, no solo se hicieron con la victoria en la complicada competición de 1962, sino que burlaron a una cultura marcadamente machista y conquistaron el corazón de muchos sanjuaninos, quienes todavía hoy las recuerdan como las suecas que revolucionaron las calles de San Juan.
Esta historia de encuentro entre las corredoras europeas y los sanjuaninos, volvió a ponerse en la retina emocional de muchos testigos de la época, gracias a un documental que retrata el paso victorioso de las suecas por la competición automovilística, dirigido por su compatriota, Milla Bergh, con la colaboración de Noelia Ávila y Cristian Rubia, dos realizadores cinematográficos sanjuaninos, quienes trabajaron durante la filmación del film en San Juan.
Lugares sumamente conocidos en la provincia, como las tribunas del Estadio Abierto Aldo Cantoni, donde fue el campamento de todos los corredores, el día de descanso de la competición, o la Área Natural La Ciénaga, de Jáchal, se podrán ver conforme pasen las escenas que retratan el paso de Ewy y Úrsula a bordo del Mercedes-Benz 220 SE, con el cual ganaron la competición.
También, se podrá vislumbrar la cobertura periodística de los medios gráficos nacionales y provinciales de la época, como el titular del diario La Nación, “Dos apellidos difíciles para una carrera fácil”, en un claro intento por menorizar la hazaña deportiva de las corredoras europeas, o el retrato minuto a minuto de los diarios de la provincia, quienes tratan de mostrar todo el paso de las suecas por la provincia, ya sea en lo que la competición respecta, o caminando en las calles sanjuaninas, como aquella vez que fueron a una peluquería y, al darse cuenta que eran ellas, se llenó de gente y los medios iban a sacarle fotos. Es al día de hoy que la hija de la dueña del local, quien para esos años era una niña, recuerda a Ewy y Úrsula, y a ese día con un gran cariño.
El paso de las corredoras suecas por San Juan dejó muchos corazones brillando en 1962, y marcó un fuego para la época. Tanto fue así, que hasta el día de hoy, al recordar el paso de las europeas por las calles sanjuaninas, existen quienes las rememoran como las mujeres que batallaron triunfal contra el machismo reinante de esa época y llenaron de victoria y glamour por donde caminaron.