Insólita situación se dio en la previa de los Juegos Panamericanos 2023. Justamente a horas de que se dispute la final femenina de fútbol entre México y Chile, la selección sudamericana se quedó sin sus dos arqueras para disputar el trascendental encuentro que dirimirá quien se queda con la medalla dorada. Y todo por una causa para nada habitual y que roza el papelón.

La Roja sufrió esta situación porque de las 18 convocadas, las dos porteras de la nómina Christiane Endler y Antonia Canales, quienes se desempeñan en el exterior, fueron llamadas por sus clubes para reincorporarse.

Por el lado de Endler, la selección de Chile ya tenía conocimiento de que el Olympique de Lyon le había dado permiso para jugar hasta el 31 de octubre. Mientras que por el de Canales, que es arquera suplente en Valencia, fue llamada por el club Che para que regrese a afrontar el partido del fin de semana por la liga, porque se lesionó la titular.

Cabe recordar, que los clubes no están obligados para ceder a sus futbolistas para los Juegos Panamericanos, puesto que no se disputan en fecha FIFA. Por esta insólita situación, Chile se quedó sin jugadoras en este puesto para jugar por la medalla dorada.