Ezequiel Garay está nuevamente en su casa tras superar la primera parte del tratamiento contra el coronavirus. El jugador de Valencia había sido diagnosticado con la enfermedad a mediados de marzo, y si bien no tuvo que ser internado pasó a estar solo para no contagiar a su familia. Durante esos catorce días aislado totalmente el zaguero central pasó por el duro momento de tener que pasar lejos de sus hijos el día del padre, que en España se celebra en marzo. Junto con él se detectaron nueve casos más de jugadores de Valencia contagiados, que también de a poco están volviendo a su casa tras superar la primera fase de la recuperación.

A través de sus redes sociales Garay informó este miércoles que regresó a su casa con su familia. "¡UN PASO MÁS! Y aunque no podamos besarnos y abrazarnos, estamos juntos. Celebrando que el aislamiento terminó, y felices porque un paso más hoy en día es una victoria. Estamos siguiendo las indicaciones médicas: después de estar en aislamiento se debe continuar catorce días más cuarentena, manteniendo la distancia y las mascarilla" puso Ezequiel en su cuenta de Instagran a la cual acompañó con una foto de su esposa. Todavía resta el alta médica definitiva donde quede totalmente descartado la presencia del virus en el organismo del jugador y sobre todo seguir despejando dudas si una persona puede seguir contagiando después de pasar por la etapa más crítica de la patología.

El equipo español fue parte de la "bomba biológica", tal como lo calificó el Alcalde de Bérgamo, en referencia al partido de ida entre Valecia y Atalanta en Milán por el partido de ida de los octavos de final de la Champions League. En ese partido hubo 40 mil espectadores entre españoles e italiano. Según médicos y científicos de la OMS confirmaron que ese cruce de gran cantidad de personas aceleró considerablemente la transimisión de virus. Justamente Bérgamo, la ciudad de donde es Atalanta, es una de las ciudades con más contagio en el país tano, junto a Milan, lugar donde se jugó el partido. Por su parte Valencia terminó siendo el conjunto con más contagios, ya que el 35 por ciento de su plantel estuvo contagiado.

De los contagiados en Valencia, además de Garay se supo que los jugadores Mangala y Gayá, también estuvieron infectados, mientras que el resto de los afectados pidió que se reserve su identidad. Más allá del jugador argentino, sus nueve compañeros también superaron la primera parte y están regresando a sus viviendas para seguir en cuarentena pero al menos en contacto con sus familiares. Con respecto al Atalanta solamente un jugador fue infectado de todo el plantel.