Vildozo: de ser un soñador en Las Casuarinas a convertirse en 'El Ángel del Gol'
El sueño de Ángel era ser delantero como su papá y jugar en primera. Para lograrlo el veinticinqueño tuvo que superar todas las piedras en el camino que se le presentan a un futbolista del interior.
Muchos son los sanjuaninos que sueñan con algún día poder jugar en la Primera División del fútbol argentino. Tristemente son pocos los que lo logran. Además del deseo y del dinero, se necesita de una madurez temprana de los chicos. El veinticinqueño Ángel Vildozo es un ejemplo perfecto de ello.
Luis Ángel llegó a este mundo el 9 de diciembre de 1981 en Las Casuarinas, departamento de 25 de Mayo. Desde que tiene memoria su vida estuvo vinculada al fútbol. Su papá se dedicaba a este deporte y el cada vez que podía iba a verlo jugar. Uno de los recuerdos que más quedó grabado en su mente fue un partido entre Del Bono y 9 de Julio.
Este encuentro definía quien ascendía a la Primera A de la Liga Sanjuanina. Vildozo padre defendía la camiseta del conjunto celeste y esa noche se vistió de héroe. Cumpliendo su rol de delantero el jugador se despachó con "Hat Trick". Gracias a ese triplete dicha institución ascendió a la siguiente categoría.
"Más que nada quien me motivaba a jugar era mi papá, porque lo veía jugar. Yo estuve mirando esa final. Tenía fanatismo por mi papá. Lo veía y quería jugar en su posición", recordó Luis. Gracias a este tipo de experiencias el soñador de Las Casuarinas empezó a jugar algunos torneos en su pueblo a los 9 años de edad.
Comenzó a vestir los colores del Cultural Villa Borjas. En el polideportivo de este club se hacían campeonatos de Fútbol 7, donde el pequeño empezó a mostrar toda su magia con la redonda. A partir de ese momento nunca despegó sus pies de la pelota. Apoyado por toda su familia siguió subiendo escalones para cumplir sus sueños.
A sus 16 años se le presentó la gran oportunidad de irse de San Juan para probarse en una escuela de fútbol de Rosario. Si bien fue difícil despegarse de sus seres queridos, el sanjuanino decidió no desperdiciar esta chance y viajó. Tristemente para él no quedó entre los seleccionados.
"Me fui de San Juan a los 16 años y a los 17 pegué la vuelta. Estaba prácticamente caída mi opción de seguir jugando porque estaba en Rosario y no había quedado entre sus mejores jugadores, no había jugado mucho y tuve que viajar a hacer una prueba nuevamente", rememoró.
Al enterarse de esto su papá tuvo una importante charla que Ángel nunca olvidó. El le dijo: “Tratá de quedar, porque a vos te gusta esto, te apasiona. Hace todo lo posible por quedarte allá”. Su progenitor ya había entendido que el futuro de su pequeño estaba fuera de casa y decidió motivarlo para que él también lo notara.
"Yo le dije: “Si pa, te prometo que voy a hacer todo lo posible por quedarme allá", le prometió el pibe en ese momento. Haciendo valer su palabra a sus 19 años de edad logró sumarse a las filas de un club tan importante como All Boys. Luego de un tiempo en la institución lo subieron a la primera del club y el técnico que estaba en ese momento empezó a darle minutos.
Sólo le tomó tres partidos para mojar por primera vez con el primer equipo. Ese partido contra Atlanta quedó dando vueltas en su memoria hasta el día de hoy. Su estadía en el "Albo" no era muy segura, ni siquiera había firmado un contrato profesional y aún así se las ingenió para ser tenido en cuenta.
"Fue contra Atlanta en el minuto 50. Yo tenía 3 partidos en Primera recién, no tenía contrato, no cobraba viáticos, vivía en la pensión del club, todavía no agarraba ni un peso del fútbol y convierto mi primer gol. Era un partido televisado justo, así que mi familia lo pudo ver desde San Juan. Fue muy especial", expresó.
Logró mantenerse cuatro años en el equipo hasta que pasó a Comunicaciones donde tuvo dos pasos. Luego fue Unión Española y Unión San Felipe, ambos clubes de Chile. Hasta que en el 2010 llegó el que sería el peor momento de su carrera. Lo contactaron desde un club de Ecuador, Centro Deportivo Olmedo, y las negociaciones llegaron a buen puerto.
"La peor experiencia como futbolista la viví en Ecuador. Estuve 3 meses y la verdad que la pasé mal, pude hacer solamente un gol. Había mucha altura en el club donde yo jugaba que era el Olmedo. La verdad que mi estadía allá fue mala, el equipo andaba mal y no pude nunca hacer pie", reveló.
Por suerte para él todo tiene un final y en el 2011 retornó al fútbol argentino para sumarse al plantel profesional de Colegiales. En este club Ángel volvió a encontrarse con su mejor versión. En la temporada 2011-2012 marcó 21 goles y dio una asistencia en 38 encuentros. Claramente "El Ángel del Gol" estaba de vuelta y sus estadísticas lo avalaban.
Este gran rendimiento hizo que un viejo conocido volviera a fijarse en el. All Boys, que en ese momento ya se encontraba en la máxima categoría del fútbol argentino, se mostró interesado en ficharlo. Esta era su gran oportunidad de dar el salto a Primera División y cumplir su sueño más anhelado.
Todo se dio de la mejor manera y Vildozo regresó al club. Las cosas parecían mejorar, dejando atrás esa espantosa experiencia en Ecuador. Poco después pudo marcar su primer gol en la Primera División. "Fue contra Quilmes, empatamos 1 a 1 y fue al minuto 43 del segundo tiempo. Yo entré y jugué 10 minutos. Ya tenía muchos goles, ya tenía 30 años, pero hacer mi primer gol en Primera fue impresionante", destacó.
No obstante esa temporada iba a marcar uno de los tantos más recordados de su carrera. El sanjuanino le marcó un gol a nada más ni nada menos que a Boca Juniors, dejándolo afuera de la Copa Argentina. Teniendo jugadores como Riquelme enfrente, lograron superarlos.
Los años pasaban y su rendimiento parecía no decaer en ningún momento. Entre los años 2013 y 2015 vistió la camiseta de Aldosivi, donde consiguió ascender a Primera. El conjunto marplatense tuvo que esperar más de 100 años para lograr el ascenso, por lo que Vildozo y sus compañeros quedaron en la historia grande.
"El título que más disfruté yo creo que es el de Aldosivi. El llegar a Primera fue impresionante porque era la primera vez que el club llegaba después de más de 100 años y, bueno, hacer el gol en el partido del ascenso es algo que no me voy a olvidar más. El recibimiento que tuvimos en Mar del Plata, la caravana, horas para entrar a la ciudad, había muchísima gente. Veníamos de Córdoba, de lograr el ascenso en la cancha de Instituto y la verdad que fue impresionante", destacó.
Luego de conseguir este logro inolvidable, el fútbol lo llevó en 2019 a emigrar otra vez del país para jugar en un equipo que conocía muy bien. Tuvo la chance de regresar a Unión San Felipe, donde los hinchas lo tomaban como un sanfelipeño más. A pesar de que siempre existió una rivalidad enorme entre Argentina y Chile en el fútbol, a los hinchas de Unión parecía no importarles.
La institución trasandina se consagró en la Copa Chile, por lo que el sanjuanino pudo disputar la Copa Sudamericana. Sin embargo el tiempo pasa para todos y esa temporada, a sus 37 años de edad "El Ángel del Gol" colgó los botines. Lejos de estar triste, se sintió agradecido de poder hacerlo un club al que le tiene un gran cariño.
Si bien no iba a hacerlo desde el verde césped, Luis siempre quiso seguir vinculado al fútbol. Se recibió de director técnico, de periodista deportivo, hizo cursos para ser mánager deportivo y asesor deportivo. En el 2020 tuvo la oportunidad de trabajar por primera vez como DT en las divisiones juveniles de Comunicaciones. No obstante, en ese momento otra inesperada pero gratificante chance tocó a su puerta.
Uno de sus allegados había sido elegido para ser scout de Independiente del Valle, uno de los clubes más importantes de Ecuador. Esta persona no estaba en condiciones de tomar ese trabajo, pero no dudó en deslizar su nombre a modo de recomendación. Gracias a ello desde la institución ecuatoriana llamaron a Ángel.
"Estuve durante la pandemia haciendo entrevistas de trabajo e informes. Desde junio hasta octubre estuve a prueba y a partir de noviembre fui seleccionado oficialmente como scout. Empecé a trabajar con ellos con toda la selección de jugadores y con el mercado de pases de diciembre en que se tenía que incorporar. Se incorporaron a 3 jugadores de los cuales hicimos informes. Un boliviano, un ecuatoriano y el jugador argentino que jugaba en Atlanta, Nicolás Previtali", comentó muy feliz.
Las autoridades de Independiente vieron en Ángel un gran potencial como "cazatalentos". La razón es su basta experiencia en el deporte y a los contactos que ha conseguido en sus más de 20 años vinculado a la disciplina. "Llegó de sorpresa porque no era algo de lo que había estudiado. Sin embargo es una oportunidad muy linda para mí. Hay una estructura muy sólida en Independiente del Valle. Estoy trabajando desde Buenos Aires donde registro todos los partidos a través de vídeo. También miro lo que es Uruguay, Chile y Colombia. Hago un scouting bastante general de Sudamérica", mencionó.
De esta manera Ángel logró su objetivo: seguir metido en el fútbol a pesar de no hacerlo como jugador. No cabe duda que Vildozo es uno de los mayores referentes que pueden tener los futuros futbolistas sanjuaninos. El veinticinqueño vivió lo peor y lo mejor del fútbol. A pesar de haber tenido que pasar por todo eso, uno de sus mayores sueños es que los niños y adolescentes no tengan que pasar por lo mismo. Para ello tiene el objetivo de crear una pensión en Buenos Aires para chicos y chicas de San Juan.
"Es un sueño que tengo hace mucho tiempo la pensión en Buenos Aires. Yo viví en cuatro pensiones, entonces sé muy bien lo que es, lo que te ayuda, lo que se necesita y los cuidados que hay que tener. Hoy el fútbol femenino también es importante, entonces también es una posibilidad de crear una pensión para futbolistas mujeres. Lo primero que tengo que ver es la cantidad de chicos y chicas que hayan, pero bueno, siempre soñé con esa posibilidad de traer jugadores acá Buenos Aires", aseguró.
Su objetivo es brindarle comida, estadía, estudio y transporte a los adolescentes que como él hace 20 años atrás, sueñan con llegar a lo más alto. "Gracias a mis contactos tengo muchos amigos técnicos y coordinadores en clubes en los que se puedan probar tranquilamente. Lo que pasa es que tienen que venir un poco respaldados económicamente desde allá. Ojalá que pueda ayudar al fútbol sanjuanino, podría ser algo que haga que el fútbol sanjuanino crezca", sentenció.