El Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA), que viene midiendo indicadores socioeconómicos hace años, elaboró el informe de pobreza del primer trimestre del año. Y esos datos no son alentadores, inclusive empeoraron respecto al último tramo de 2023, arrojando que casi un cuarto de los niños de entre 3 y 5 años se encuentran fuera del sistema educativo formal.

En el relevamiento de pobreza también hace foco en la situación educativa, y en ese aspecto se destaca el dato de que el 23% de los niñas y niños de entre 3 y 5 años no asiste a establecimientos educativos formales, el 0,4% de los que tienen entre 6 a 12 años no va a la escuela primaria, el 9,1% asiste con sobre edad a la escuela primaria y el 35,3% de los jóvenes de 18 a 29 años no terminó la secundaria. "Estos indicadores expresan valores adversos a pesar de que el sistema general de gestión pública (80,7% de los alumnos de menos de 18 años) se ve fortalecido por la acción de la gestión privada (12,6% en establecimientos privados laicos y 6,8% en establecimientos religiosos)", añaden.

Como contracara, se consigna que los índices de mortalidad infantil registraron mejoras entre el 2005 y el 2022, aunque el panorama es dispar. "La tasa de mortalidad infantil, de menores de 1 año y de menores de 5 años, presenta una mejora general a través del tiempo, 2005 a 2022, pero una mayor heterogeneidad entre la situación de cada una de nuestras provincias. En general, al considerar los datos por provincias, se observa que los altos niveles de mortalidad infantil tienden a correlacionarse con altos niveles de indigencia monetaria", se analiza en el informe del ODSA.

Por último, al poner la lupa en el mercado laboral, el sondeo revela que "el 32,5% de los ocupados son trabajadores que residen en hogares en situación de pobreza, el 30,9% de los ocupados trabaja en la economía social y, al considerar a la población económicamente activa el 26,5% tiene un empleo precario y el 24,3% un subempleo inestable".