En la jornada del lunes, el Gobierno presentará el proyecto de ley para cobrar un impuesto especial a la renta inesperada. De acuerdo con lo que mencionaron, la presentación será realizada por el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía Martín Guzmán.

Con esto, el Poder Ejecutivo buscará volver a mostrar gestión tras el recambio ministerial de este fin de semana, que le costó el lugar a Matías Kulfas al frente del Ministerio de Desarrollo Productivo. El proyecto de renta inesperada había sido anunciado por Guzmán a principios de abril y tuvo unos dos meses de trabajo técnico. Los primeros datos indican que apuntarán a aquellas ganancias “extraordinarias” que no responden a un incremento de la inversión sino al efecto del shock internacional de precios que provocó la guerra en Ucrania.

Es así como aludieron a que se trataría de una alícuota sobre la renta que no se corresponda con incrementos en la inversión sino que tenga como explicación el salto de precios internacional. Esas ganancias deberían ser superiores a los $1.000 millones en el año. En su momento, el jefe del Palacio de Hacienda, se trata de una “fracción muy pequeña”, de empresas.

La iniciativa que busca cobrar renta inesperada ya recibió cuestionamientos de cámaras empresarias. Una de las criticas llegó desde la Asociación Empresaria Argentina (AEA) quienes aludieron: “La Argentina debe volver a retomar la senda del desarrollo económico y social sostenible. Para ello resulta esencial generar las condiciones para que las pequeñas, medianas y grandes empresas puedan concretar inversiones que generen empleo y hagan crecer la producción y las exportaciones. La creación de nuevos impuestos -como el recientemente anunciado ‘impuesto a la renta inesperada’- va en la dirección opuesta a lo señalado. En la Argentina ya están en vigencia 165 impuestos y la carga tributaria sobre el sector formal de la economía es muy elevada y ha crecido fuertemente en los últimos 20 años, superando holgadamente el promedio de la región”, señaló AEA.