La gente comenzó a tomar conciencia de las medidas de prevención por el coronavirus y cada vez son más las personas que deciden aislarse. Esto afectó severamente a muchos sectores que dependen de esto, como los vendedores ambulantes. En este sentido, dialogamos con la mujer que ofrece café en la puerta del Banco San Juan de calles Las Heras.

Allí, ya son pocos los jubilados que pasan a cobrar sus haberes. "Las ventas empezaron a caer un montón desde la semana pasada cuando la mayoría entró en cuarentena", afirmó. 

La mujer destacó que antes vendía de 12 a 18 termos por día y ahora no vende ni 6."El café con medialuna sale $40. Por ahora solo estamos acá porque había mucha gente. Hasta el díario vendíamos pero ahora no se vende ni eso", aseguró. Explicó que lo que gana ahí "es el pan de cada día".

A ella, no le queda otra que ir "a ver qué pasa". "Somos unas 10 personas las que vivimos de esto, la familia de mi suegro y la mía. La panificación si no se vende se pierde", agregó. Ante esto, tienen el gran gesto de repartir lo que no venden a los cuidacoches o a los remiseros.