Los aumentos que llegan en julio y presionarán sobre el bolsillo
Hay al menos cinco incrementos programados para el séptimo mes del año que impactarán en el índice general de precios.
Pese a que el Gobierno busca contener la inflación, en julio hay al menos cinco aumentos confirmados que presionarán sobre el bolsillo de los argentinos. De esta manera, el séptimo mes del año estará marcado por alzas de los combustibles, alquileres, prepagas, tarifas de luz, gas y agua, entre otros servicios que sumarán al índice general de precios.
Los inquilinos que firmaron un contrato bajo la Ley de Alquileres -que actualiza el precio anual a través del Índice de Contratos de Locación (ICL) que combina inflación y salarios- tendrán un aumento que rondará el 240%. Esta fórmula se aplica únicamente a los alquileres iniciados entre el 1° de julio de 2020 y el 17 de octubre de 2023.
Más allá de la derogación de la ley 27.551 con el mega DNU impulsado por la gestión de Javier Milei, los contratos en curso deben ser respetados hasta su fecha de vencimiento. Esto significa que mientras el acuerdo esté vigente, todos los términos y condiciones se mantendrán hasta el momento de su finalización.
De esa manera, si una persona comenzó a alquilar el 1° de julio de 2023 y enfrenta, entonces, su primera actualización anual en base al índice que elabora el BCRA, tendrá un aumento del 244,4%. Si pagaba $150.000 por mes un año atrás, ahora pasará a abonar $516.600 mensuales por la misma vivienda hasta julio de 2025.
Los precios de la nafta deberían aumentar 12,5% promedio y el gasoil un 10% este lunes 1° de julio. Eso si se aplica la actualización que el Gobierno vine postergando de los impuestos al combustible líquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC), que se traslada a los valores finales de manera directa. El Gobierno debe definir si traslada toda la actualización o, como en junio, la segmenta para frenar el impacto en precios. A esa suba, se sumará la decisión de las petroleras.
En lo que va de 2024, los precios de las naftas y el gasoil acumulan un alza de 63,65% promedio.
Después de la discusión judicial a raíz de la presentación que realizó el Gobierno, las empresas de medicina privada acordaron que desde julio los aranceles se ajustarán “libremente”. Además, se comprometieron a devolver en 12 meses lo cobrado por encima de la inflación entre enero y abril.
De esta manera, para el séptimo mes del año al menos cuatro grandes empresas comunicaron a sus afiliados que los aumentos de las cuotas rondarán el 6,7% y 8,5%.
Las empresas comenzaron a anticipar a sus clientes que, a partir de los primeros días de julio, llevarán a cabo un nuevo retoque de tarifas, con un incremento que rondará entre el 6 y el 9%, según el servicio y la operadora.
En el caso particular de las tarifas de luz y gas, todavía faltan oficializarse algunas decisiones. Las previsiones del Gobierno eran ajustar por inflación futura desde julio. Se trata de un nuevo cálculo de actualización, pero aún resta conocer cómo se realizará el cálculo.
En principio, el equipo económico había fijado una fórmula que tenía en cuenta la variación salarial, el índice de precios al consumidor (IPC) y la inflación mayorista (IPIM), aunque su implementación se suspendió en mayo y junio por orden del ministro de Economía, Luis Caputo.