El debate en torno al Proyecto RIGI tiene discrepancias dentro del sector minero. Grandes empresas y cámaras empresariales, principalmente del rubro minero, están presionando por la aprobación y el respaldo del RIGI, argumentando que este proyecto es crucial para facilitar las inversiones en la gran minería metalífera.

Sin embargo, llama la atención que al menos un sindicato que representa al personal jerárquico minero ha expresado objeciones y desacuerdos con respecto al RIGI. Se trata del Sindicato del Personal Jerárquico Minero, cuyo secretario general, Marcelo Mena, quien compartió su perspectiva en Banda Ancha.

"Mantenemos objeciones a la aprobación del RIGI, especialmente en lo que respecta a la importación de nivel cero", declaró Mena. "Esta disposición podría resultar perjudicial para las pequeñas y medianas empresas (PYMES), especialmente en el sector minero".

Mena argumenta que la importación de nivel cero podría impactar negativamente en el desarrollo de proveedores locales y en el crecimiento de las comunidades mineras. "No podemos tomar decisiones a la ligera en cuanto a la importación a tasa cero. Esta medida podría socavar la actividad industrial y no necesariamente garantizaría un aumento en la actividad minera", enfatizó.

El dirigente sindical también hizo hincapié en la necesidad de una política minera integral que sea discutida a nivel nacional y provincial, con un enfoque que respete el federalismo y se adapte a las particularidades de cada región minera del país. "Las inversiones en el sector minero son un proceso que requiere una planificación cuidadosa y un enfoque a largo plazo", dijo. 

"Si se aprueba el RIGI, corremos el riesgo de destruir la industria local", advirtió Mena. "Las empresas mineras, en lugar de comprar indumentaria y materiales localmente, podrían recurrir a importaciones extranjeras debido a la tasa cero de importación", dijo. A ello sumó "Esto afectaría negativamente a los proveedores locales y a la mano de obra que depende de la industria textil y de otros sectores".

Mena subrayó la importancia de proteger y fortalecer la industria local como parte integral del desarrollo económico de la provincia. "Queremos que haya más minería, pero no a expensas de la industria local", enfatizó. "Nuestra provincia debe ser próspera en todos los aspectos, y eso incluye el fortalecimiento de nuestras industrias locales", mencionó.

En cuanto al impacto del regreso de los impuestos a las ganancias para asalariados, Mena señaló que afectaría directamente a todos los trabajadores, incluidos los del sector minero. "Estamos peleando por el salario y contra las ganancias", afirmó. "El retorno de este impuesto tendría un impacto significativo en los bolsillos de los trabajadores y en la economía provincial en general", dijo.

Además, Mena enfatizó que, si se aprobara el esquema  de ganancias, el impacto sería significativo para los trabajadores. "Estaríamos pagando entre 900,000 y 1.300.000 por mes, dependiendo del sueldo", explica. "Este es el promedio que tendríamos que estar pagando por trabajador si avanzamos con este esquema, e incluso en algunos casos un poco más".

Destacó también que son 65 sindicatos los que componen la mesa y están peleando por el salario en las ganancias. "Hemos pedido al Senado una reunión con todo el arco político para explicar nuestras herramientas y nuestro punto de vista", agregó. "Porque si esto vuelve, lo vemos negativamente. El trabajador, al salir con su salario a comprar carne, verdura o un electrodoméstico, terminará destinando todo al descuento tributario, que no contribuirá a la recaudación en la provincia".

Mena también destacó la importancia del diálogo con los representantes políticos para abordar estas preocupaciones. "Hemos tenido conversaciones con senadores locales, buscando transmitir nuestra posición y encontrar soluciones que beneficien a todos", comentó.