Viñateros le piden "precio sostén" a Alberto, por una promesa de Massa
La Asociación de Viñateros Indepedientes presentó un informe según el cual, en dos años, el precio del litro de vino tinto cayó cinco veces. Y el blanco se derrumbó casi cuatro veces. En buena medida, esto se explica por la devaluación del peso.
A través de un estudio presentado este martes, la Asociación de Viñateros Independientes denunció que el precio del litro de vino tinto se cayó cinco veces en dos años y el blanco casi cuatro veces, medidos ambos en centavos de dólar, debido a la brutal devaluación del peso. Entre las medidas de contingencia, le pidieron al presidente electo Alberto Fernández un "precio sostén", tomándole la palabra al ahora diputado nacional electo Sergio Massa, que hizo la promesa en campaña.
El estudio divulgado este martes tomó todas las operaciones de compras de vinos a granel en septiembre de 2017 y septiembre de 2019, registradas e informadas por la Bolsa de Comercio de Mendoza. Ese relevamiento arrojó que el precio promedio de los vinos tintos a septiembre de 2017 era de $ 12,45 el litro, con un dólar de $ 17,60. Esto significaba 0,70 dólar por litro.
En septiembre del 2019, último informe dado por la Bolsa de Comercio de Mendoza, el precio promedio general de los vinos tintos era de $ 8,82 por litro. Tomando un valor del dólar de $ 65,00 da 0,13 dólar por litro.
Es decir que, a valor dólar, el precio del vino tinto del productor cayó en dos años 5,23 veces.
Un resultado semejante arroja el análisis con el vino blanco. El precio promedio general de septiembre del 2017 era de $ 7,56. Traducido a valor dólar era 0,42 dólar por litro.
En septiembre del año 2019, el precio promedio fue de $ 7,27. Dividido por el valor del dólar de $ 65,00 da 0,11 dólar por litro de vino blanco.
De este modo, en el caso del vino blanco el precio a valor dólar cayó 3,81 veces.
El comunicado de Viñateros Independientes agrega que la mayor parte de los insumos que necesitan están dolarizados. La caída de sus ingresos en moneda estadounidense impacta de lleno en la rentabilidad de su actividad.
Atribuyeron la crisis a un cúmulo de causas, como la importación masiva de vino tinto que habilitó el gobierno de Cambiemos, la ausencia del Estado que no implementó ninguna medida regulatoria, favoreciendo la generación de sobrestock vínico que favorece a los grandes formadores de precios, el "apoyo de Coviar a esa política destructiva", el "apoyo relativo" por parte de los productores a las entidades que reclamaban contra estas políticas, entre otras razones.
La asociación denunció el abandono de viñedos, el cierre de bodegas y el achicamiento de la elaboración, tendiendo a la mayor concentración del volumen en pocas manos. También apuntó el grave problema que representó el tarifazo y el aumento constante de los combustibles.
En el comunicado, Viñateros Independientes sostuvo que aumentó la desocupación en el campo y también aumentaron los atrasos de pagos de aportes y contribuciones, y los embargos de cuentas corrientes realizados por AFIP.
Finalmente el documento aporta algunas soluciones, apelando directamente al nuevo presidente electo, recordando que el gobierno entrante "ha prometido lograr un precio rentable para el productor". Y ahí citó la promesa de campaña de Massa, quien habló de "precio sostén". Para ello, cuentan con la redistribución de la rentabilidad a lo largo de toda la cadena de valor, como ocurre con la yerba mate.
Aseguran también que la cosecha de Europa ha sido muy baja, con alrededor de tres mil millones de litros menos, y habrá, por lo tanto, una mayor demanda del exterior para los vinos y mostos argentinos. Para ello, requieren mantener un dólar competitivo y eliminar las retenciones, además de aumentar los reintegros.