Un violento intento de robo sacudió el barrio porteño de Barracas el pasado jueves por la tarde, dejando como saldo la muerte de uno de los delincuentes y heridas en su cómplice. La dramática situación ocurrió cuando dos sospechosos abordaron a una mujer junto a sus dos hijos en el cruce de las calles Iriarte y Pedriel, con la intención de robarle el auto.

Según relató Susana, la víctima del intento de robo, ella regresaba a su casa junto a su hija de 28 años y su hijo de 25, quien padece autismo, trastorno generalizado del desarrollo (TGD) y epilepsia. Fue entonces cuando notaron la aproximación de los dos sospechosos, y en un instante, uno de ellos apuntó con un arma a Susana, exigiendo las llaves del vehículo.

Sin poder sacar a su hijo del auto, los delincuentes emprendieron la huida con él dentro. En medio de la desesperación, un policía, que estaba de franco de servicio y vestido de civil, intervino y se enfrentó a los ladrones. En el tiroteo subsiguiente, uno de los delincuentes, de tan solo 15 años, resultó herido en el lugar.

Susana expresó su agradecimiento al oficial por su valentía, reconociendo que arriesgó su vida por salvar a su hijo y a ellas. Sin embargo, el otro ladrón, de 26 años, logró escapar con el hijo de Susana dentro del vehículo robado, pero chocó a pocas cuadras y cayó muerto al intentar huir a pie, producto de las heridas de bala recibidas durante el enfrentamiento con el oficial.

Este incidente, aunque resuelto gracias a la intervención policial, dejó a la familia afectada y conmocionada. Además, el auto, utilizado para llevar a terapias al hijo de Susana, quedó destrozado.

 La víctima contó que este hecho de inseguridad se suma a otro que le ocurrió hace cuatro meses, cuando Susana fue atacada por tres delincuentes en el parque Leonardo Pereyra, quienes la hirieron con una picana eléctrica y solo se llevaron un celular.