Juan Carlos Galarregui, dueño de la casa donde encontraron el cuerpo de Rocío Fernández dentro de una heladera y principal sospechoso por el femicidio, fue detenido este jueves a la madrugada en la terminal de micros en Santa Clara del Mar. El hombre, que había huido de la policía tras el hallazgo del cadáver, estaba a punto de abordar un ómnibus con destino a la Ciudad de Buenos Aires para continuar con su escape.

Galarregui, de 56 años, era intensamente buscado como principal sospechoso de asesinar a Rocío Fernández, la joven de 27 años cuyo cuerpo fue hallado el pasado miércoles al mediodía dentro de un freezer en una vivienda situada en la calle Grecia al 1000, del barrio 9 de Julio de Mar del Plata.

Previo a su detención, el sospechoso fue requisado por efectivos policiales y mostró un documento falso, con la identidad de otra persona que tenía características físicas muy similares. Al ser consultado sobre datos claves como su domicilio, el hombre no supo responder y levantó las sospechas. Finalmente, fue reconocido por señas particulares, como los tatuajes en ambos brazos y en el peco.

El fiscal Fernando Berlingeri, a cargo de la investigación, fue notificado de la aprehensión y dispuso que Gararregui sea trasladado a los tribunales de Mar del Plata en el marco de la causa caratulada como femicidio.