Cecilio Saettone, primo del femicida de Ángeles Rawson, estuvo casi un año prófugo. Había sido condenado por falso testimonio en dos oportunidades. Debido que en sus declaraciones había intentado beneficiar a Jorge Mangeri, el encargado de un edificio de Palermo que en junio de 2013 abusó sexualmente y mató a la adolescente Ángeles Rawson, de 16 años.

Fue en diciembre de 2017, que el juez Luis Salas, integrante del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) porteño N° 1 había condenado a Saettone por dos hechos de “falso testimonio agravado”. Quien en sus últimas palabras, antes de conocer el fallo se acercó al estrado para decir: “Soy inocente”.

De acuerdo a lo que la investigación arrojó, el expolicía colaboró con Mangeri antes de que fuera detenido y mintió para favorecerlo en dos oportunidades: una en 2013, cuando fue a declarar ante el juez Javier Ríos, y, la otra, en 2015, en el juicio oral contra donde el portero fue condenado a prisión perpetua.

Luego de la condena, cómo esta no estaba firme, Saettone, de 62 años, no había sido detenido. Pero según informó  la agencia de noticias Télam en junio pasado, cuando se cumplió el décimo aniversario del homicidio de Ángeles, estaba formalmente prófugo desde el 16 de septiembre de 2022. La pena impuesta coincidió con lo que había solicitado la fiscal Mónica Cuñarro.

Tras declararlo prófugo, la Secretaría de Captura de Prófugos de la Unidad Fiscal Especializada en Investigación Criminal Compleja (Ufecri), a cargo de José María Campagnoli, se sumó a la búsqueda del Saettone.

“En las últimas horas, tras tareas investigativas, se ubicó al prófugo en El Talar, en Tigre, en cercanías del domicilio que tenía denunciado en el Registro Nacional de las Personas (Renaper). Se lo ubicó en una camioneta, cuando descendió del vehículo se lo ubicó e identificó y quedó detenido”, indicó una fuente de Secretaría de Captura de Prófugos, conducida por Juan Pablo Bello a Diario La Nación.

“Se comenzó una discreta investigación. Como resultado de toda la recopilación de información y de las tareas de campo efectuadas en El Talar, partido de Tigre, se determinó que todo el grupo familiar del prófugo continuaba viviendo en su domicilio de Groussac 2130, pero no así Saettone. Por información de vecinos de la zona, se determinó que se encontraría oculto en otra casa de El Talar. Hoy, se lo detectó cuando circulaba en una camioneta y se decidió interceptar el vehículo para su detención”, informaron fuentes policiales.

Cabe recordar que, para la Justicia quedó probado que el portero, con la excusa de entregarle a Ángeles unas facturas de servicios, la llevó al sótano del edificio donde la asesinó después de abusar sexualmente de la víctima. El femicida, luego de estrangular a la adolescente con la mano derecha y tapar su boca y nariz con la mano izquierda, dejó el cuerpo de la menor durante cinco horas en el sótano. Más tarde, el imputado acopió las bolsas de basura y acondicionó el cuerpo de la víctima para que pudiera cubrirse con una bolsa de consorcio y así sacarlo del edificio.