Cada 8 de diciembre se celebra el Día de la Inmaculada Concepción de María, también conocido como el Día de la Virgen María o Día de La Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María. Es considerada una de las trece fiestas marianas del calendario de la Iglesia Católica, y la conmemoran todos los fieles al catolicismo. Asimismo en Argentina esta fecha es considerada feriado nacional, uno de los últimos del año.

Este dogma desarrollado por la Iglesia Católica sostiene que Dios preservó a María desde el momento de su concepción, de toda mancha o efecto del pecado original de Adán y Eva que había de transmitirse a todos los hombres por descendencia. De ahí la expresión del arcángel Gabriel “llena de gracia” (Gratia Plena), reflejado en la Biblia.

Se celebró informalmente por primera vez en España, en el año 1644. Fue el Papa Pio IX quien la proclamó el 8 de diciembre de 1854. Su celebración inaugural se dio en la Basílica de San Pedro de Roma, Italia. Posteriormente, la festividad se replicó en otras iglesias, dando lugar a oraciones multitudinarias y festejos en las calles. En Roma, muchas torres hicieron sonar 300 veces sus campanarios como signo de celebración. 

A raíz del Día de la Virgen María, suceden dos cosas importantes en Argentina. Por un lado, es la fecha en la que se acostumbra a armar el arbolito de Navidad y además es feriado, en algunos donde incluso resulta fecha inamovible. En San Juan, miles de fieles se congregaron para seguir a la virgen en las dos procesiones que hay en la jornada. En la madrugada del miércoles los sanjuaninos asistieron a la procesión en calle San Luis y Tucumán; luego la segunda empieza en el Santuario a las 19:30, en Concepción.

Día de la Inmaculada Concepción: la historia detrás de la celebración
La inmaculada concepción en San Juan

fuente la nación