El lado B de la vacuna que promete ser la salvación contra el Covid-19
El laboratorio sueco-británico informó que debió pausar las pruebas del avance de la Universidad de Osxford, para realizar análisis un proceso de revisión
La vacuna contra el Covid-19 es lo más esperado por la población mundial. No es extraño entonces, que ante cada novedad, la gente se interese saber en qué instancia se encuentran los avances científico. Una de las más avanzadas es la desarrollada por la Universidad de Oxford, que Argentina producirá. Este martes, a través de un comunicado oficial, AstraZeneca (laboratorio que se encargará de su fabricación) informó que debieron pausar las pruebas de la dosis por ‘posibles reacciones adversas’.
Se desconoce la identidad del participante afectado, del cual solo se sabe que es del reino Unido. “Como parte de las pruebas aleatorias y controladas de la vacuna contra el coronavirus de la Universidad de Oxford a nivel global, nuestro proceso de revisión estandar gatilló una pausa en la vacunación para permitir la revisión de la información del paciente", indicó el laboratorio sueco-británico en un comunicado.
Y agregó: “Esta es una acción de rutina que tiene que suceder cuando, durante el desarrollo de las pruebas, tiene lugar una enfermedad que potencialmente no tenga explicación. La decisión asegura que se mantenga la integridad de las pruebas. Durante el transcurso de pruebas de gran envergadura habrán enfermedades aleatorias, pero estas deben ser revisadas de manera independiente. Estamos trabajando para acelerar la revisión de este único evento para minimizar cualquier potencial impacto en los objetivos temporales de la prueba. Estamos comprometidos con la seguridad de nuestros participantes y mantenemos los más altos estándares en nuestras pruebas”.
Hasta el momento el laboratorio no precisó cuáles fueron los síntomas desarrollados por la persona que llevó a paralizar el proceso. Sin embargo, el prestigioso sitio especializado Stat News los describió sospechas de una “seria reacción adversa”. No obstante, una fuente indicó al medio que se espera que la persona se recupere.
Stat explicó su vez que este tipo de pausas son comunes en estudios de gran magnitud como lo son las fases 3 -requieren decenas de miles de personas- pero enfatizó en que la preocupación por cualquier posible adversidad se ve exacerbada dada la necesidad de obtener una vacuna cuanto antes para contrarrestar la pandemia.
La vacuna en cuestión, denominada AZD 1222, no había presentado ningún efecto colateral grave en la fase I/II del estudio, realizada en 1.077 adultos sanos de entre 18 y 55 años. Los voluntarios produjeron respuestas inmunes de anticuerpos y células T que pueden combatir el virus, según se informó el pasado 20 de julio.
Los resultados publicados en The Lancet confirmaron que una dosis única de AZD1222 resultó en un aumento de cuatro veces en los anticuerpos contra la proteína del pico del virus SARS-CoV-2 en el 95 por ciento de los participantes un mes después de la inyección. En todos se indujo una respuesta de células T, que alcanzó su punto máximo el día 14, y se mantuvo dos meses después de la inyección.