Un macabro hallazgo sorprendió a los vecinos de un tranquilo barrio mendocino. En una casa abandonada, encontraron el cadáver de un hombre empalado y dieron aviso al 911. El hecho ocurrió en la localidad de Ingeniero Giagnoni, departamento de Junin.

La víctima fue identificada como Fernando Bustos Vega de 54 años. El cuerpo se encontraba en un avanzado estado de descomposición, con uno de sus brazos separado del cuerpo y un palo en su cavidad anal, según el detalle de las pericias criminalísticas.

El hombre, vivía en la indigencia y tenía dos denuncias por abusos en su contra. Según informaron fuentes judiciales de Mendoza, una de ellas del 2016 por abuso agravado y otra en el 2020 por abuso simple.

Según testigos, el hombre solía dormir en el lugar donde fue hallado sin vida. La policía investiga el hecho que fue caratulado como Homicidio.

Las hipótesis indican que se trató de un crimen violento y no descartan que haya sido una venganza por las causas de abuso que Vega tenía en su contra.