Finalmente, la Justicia dio con el paradero de la mujer que fingió estar embarazada de trillizos. Desde el 29 de enero que la individua estaba desaparecida, día en que supuestamente tenía programada la cesárea. Según informó Infobae, la encontraron en la casa de su ex pareja, en Berazategui, Buenos Aires.

Mediante un gran operativo la Policía y personal judicial dio con la mujer. De esta manera, la actual pareja de la mujer quedó librado de la causa, puesto que la Justicia corroboró que fue engañado con que iba a ser padre por triplicado.

El hombre engañado le había entregado a la Justicia su celular para que fuese peritado, analizaran sus movimientos, mensajes y llamadas. Si bien los investigadores no creían que la pareja tuviera participación en su desaparición, quería confirmarlo con una prueba contundente.

‘Está desconcertado. No entiende por qué la mentira, dijo que nunca entró con ella al médico y que ahora se da cuenta de por qué cuando le tocaba la panza no había movimientos de un bebé, como suele pasar’, informaron fuentes allegadas al hombre.

En las últimas horas, un médico se presentó ante la Justicia y le dio un giro a la causa, ya que declaró que ella no estaba gestando y que le pidió un certificado trucho, según le confirmaron a Infobae fuentes de la investigación.

 ‘En julio pasado, la mujer fue a ver a un médico y lo quiso negociar para que le dé un certificado de que estaba embarazada cuando no lo estaba’, precisaron desde la Justicia que lleva adelante el caso.

Hasta ahora la Justicia siempre había desconfiado de que estuviera embarazada y los datos que lograron obtener daban cuenta de que había sido vista por la zona de El Pato y en la Ciudad de Buenos Aires. Hasta último momento continuaban las pericias a los movimientos de sus tarjetas de débito, así como con la SUBE.

La última vez que se había visto a Cuevas fue el 29 de enero pasado, cuando salió de la casa de su madre de 128 y 12 de Berazategui rumbo a una farmacia ubicada a cuatro cuadras. Ese día había dicho que tenía que asistir al hospital Evita Pueblo para someterse a una cesárea programada a las 17.30, según contó la familia de la mujer.

Como no volvía, la mamá de Cuevas envió a sus dos nietas a buscarla hasta el local, pero no había rastros de ella. “No la encontraron más”, subrayó la mujer el día de la desalación de su hija. Luego, fue a la comisaría para hacer la denuncia, pero como no le “prestaron mucha atención”, según sus dichos, decidió pegar la foto de Yésica por todo el barrio, con un teléfono para que la contacten.