En el marco de la investigación por el crimen de Fernando Báez Sosa a la salida de un boliche en Villa Gesell, incautaron la zapatilla con la que patearon y mataron a la víctima. Según informaron las fuentes, el calzado de lona, tenía sangre en la punta y en un costado. Ahora, el elemento, será peritado con una prueba scopométrica para determinar quién de los diez acusados fue el que lo llevaba puesto al momento de la paliza.

La zapatilla secuestrada con rastros de sangre

El fiscal Walter Mercuri fue quien reconoció el diseño en la suela porque la trama en la planta de la zapatilla era la misma que tenía la víctima en su cara. De forma inmediata, el fiscal envió imágenes a la forense que practicaba la autopsia en la morgue de Pinamar.

Según los investigadores, no había otra zapatilla con sangre en la vivienda, por lo que este objeto se convirtió en una prueba clave de la causa, junto a los videos del ataque y los resultados de las ruedas de reconocimiento. Ahora, este material será analizado por la Policía. Luego se investigará a quién pertenece el objeto y si es de uno de los dos jóvenes implicados como coautores del crimen.

La justicia peritará la prueba para determinar a quién pertenece

La semana entrante se realizará la scopometría, test criminalístico de observación y medición de marcas que se puede aplicar a ropa, entre otros.