La víspera del Año Nuevo en Mar del Plata estuvo marcada por una confusión que estuvo a punto de convertirse en tragedia. Un hombre de 36 años, de nacionalidad venezolana, se convirtió en víctima de un ataque por parte de vecinos que lo confundieron con un ladrón mientras intentaba ayudar a una mujer a cambiar la rueda de su automóvil.

La situación se desencadenó en la intersección de las calles Entre Ríos y Juan B. Justo, donde el comerciante venezolano, que alquilaba un local cercano, ofreció su ayuda a una mujer con problemas en la rueda de su vehículo. Un cuidador de autos en la zona malinterpretó la situación y acusó erróneamente al hombre de robo.

El agresor inicial, dedicado a cuidar autos estacionados, acusó al comerciante de estar robando la rueda y rápidamente dos o tres hombres, empleados de un restaurante cercano y familiares del agresor, se sumaron a la escena. Acorralaron al comerciante, lo golpearon en el suelo y le propinaron golpes en todo el cuerpo.

La esposa de la víctima, Mery Valencia, relató el incidente, destacando que su marido fue agredido a pesar de sus súplicas para que lo dejaran, explicando que era un vecino que vivía en la zona. Un llamado al 911 permitió la intervención policial, evitando una escalada mayor en la violencia.

A pesar de la intervención policial, la víctima sufrió la rotura de dos dientes y podría tener comprometida la vista de un ojo. Los agresores intentaron deslindarse de la responsabilidad, argumentando que el comerciante respondió de manera inapropiada. La Fiscalía de Flagrancia, a cargo de Facundo De La Canale, imputó a los acusados por lesiones leves, y todos quedaron en libertad. El afectado solicitó medidas cautelares de restricción tanto para los agresores como para el dueño del restaurante que los resguardó después del ataque.