Alrededor de las 3 de la mañana de este día sábado, Alfredo Sosa de 37 años, más conocido como “El mono”, se dispuso robar una vivienda ubicada en Ratery al 1600, en el barrio Fortunato de la Plaza en la ciudad de Mar del Plata.

Sosa trepó el paredón de la casa, rompió una puerta e ingresó al domicilio, de donde sustrajo un equipo de música y se fue. Sin embargo, la historia no terminó ahí para el “mono”, ya que cuando volvió a cruzar el paredón de la casa se encontró con unas 14 personas que se percataron de la situación y comenzaron a perseguirlo.

Finalmente lograron alcanzarlo a pocos metros de la casa en cuestión y comenzaron a golpearlo salvajemente, hasta que un joven que se encontraba presente sacó un machete y comenzó a atacar a Sosa, provocándole múltiples heridas de corte mientras se encontraba tirado en el suelo.

Sorprendentemente Alfredo pudo ponerse de pie, huir de sus agresores y cruzar el paredón de la casa de su madre, que se encontraba a 100 metros del lugar de los hechos, y se quedó agonizando tirado en el pasto.

La familia del delincuente lo vio tirado en el suelo lleno de sangre y procedió a llamar al 911. Sin embargo, para tristeza de ellos Sosa murió desangrado antes de que la ambulancia pudiera llegar al domicilio, por lo que con la bronca de este hecho los familiares en cuestión salieron a confrontar a los agresores. Afortunadamente la policía llegó al lugar y frenó este altercado que no pasó a mayores.

El fiscal Fernando Casto se hizo presente y junto a algunos oficiales de la Policía Científica realizaron las pruebas pertinentes y trataron de tomar declaraciones, cosa que no fue fácil ya que los vecinos se mostraron reacios a delatar a los agresores.