Un niño de 10 años manipulaba el revólver de su papá y baleó a su hermana de 7 años. Los chicos estaban jugando en una de las habitaciones de su casa en la localidad de Esquina Pozo, provincia de Santiago del Estero.

Según determinaron los investigadores el resto de la familia se encontraba en otros sectores de la propiedad, cuando escucharon un disparo de arma de fuego y los gritos de dolor de la nena. Corrieron hasta el dormitorio de dónde provenía el llanto y la encontraron tirada y con una herida de bala.

De acuerdo con las averiguaciones policiales, el menor se había apoderado de un revólver, calibre 22 milímetros, perteneciente a su papá y que estaba en uno de los muebles, y comenzó a manipularlo. En medio de ese juego accionó el gatillo y salió un disparo en dirección a su hermana. La bala ingresó en la pierna derecha, arriba de la rodilla.

La víctima fue trasladada en un vehículo particular al hospital de Clodomira. Los médicos cumplieron con el protocolo y alertaron a la policía sobre el ingreso de la paciente baleada y con pérdida de abundante sangre.

Por otro lado, los médicos compensaron la salud de la menor, quien fue derivada a un centro de salud de la ciudad de Santiago del Estero.

El proyectil le provocó serias lesiones, por lo que tuvo que ser sometida a una intervención quirúrgica. La paciente fue examinada por el médico de policía, quien determinó que era lesiones curables en 45 días, salvo complicaciones.

Intervino personal policial y la fiscal Alejandra Holgado, quien ordenó que se secuestrara el revólver y se concretaran pericias en la habitación donde estaban los protagonistas.

Con información de Diario Crónica