Protesta policial: el domingo se vivieron los momentos de más tensión en Misiones
Martín Boerr, periodista en Misiones, compartió con Cien por Horas las novedades sobre la situación de tensión que tiene como protagonistas a las fuerzas de seguridad de la provincia.
Martín Boerr, periodista en Misiones, compartió con Cien por Horas las novedades sobre la situación de tensión y protestas que se viven en la provincia. Desde el viernes, efectivos de la Policía de Misiones han estado reclamando mejoras salariales, sumándose a otros sectores de trabajadores estatales, como los docentes.
Boerr explicó cómo se desencadenaron los eventos: "La protesta comenzó el viernes a la madrugada con dos o tres camionetas llenas de cubiertas. Los manifestantes cruzaron esas camionetas en una avenida muy importante de acceso a Posadas, la avenida Uruguay, y tiraron las cubiertas cortando la calle al mejor estilo piquetero". Policías con patrulleros organizaron un piquete frente a la sede del Comando Radioeléctrico 1, generando un impacto significativo.
"A partir de ahí, se generó un impacto muy grande con una orden judicial ese mismo día. A eso de las 10, un juez de instrucción llegó con una orden de desalojo que no pudo ser efectiva porque la protesta estaba muy fuerte y los policías se pusieron firmes", añadió Boerr. La tensión aumentó cuando el gobierno provincial pidió la intervención de fuerzas federales y gendarmería a través de un comité de crisis encabezado por la ministra Patricia Bullrich.
El sábado, la situación alcanzó un punto crítico. "Hubo mucha tensión porque se esperaba que llegaran las fuerzas federales para intervenir, pero finalmente no sucedió. A eso de las 9 de la mañana, efectivos de las fuerzas federales se pusieron a 100 metros, hicieron un cordón humano y vinieron policías de la protesta de civil. Hubo empujones y trompadas, pero los federales no respondieron y finalmente los jefes ordenaron replegarse", relató Boerr.
El ministro Pérez afirmó que el gobierno optaría por el diálogo, lo que relajó la protesta. "Los policías el domingo estaban muy preocupados porque el gobierno dijo que iba a exonerar y denunciar penalmente a muchos policías que estaban allí. Ahora se negoció que eso no va a suceder. Por ello, por el momento hay incógnita sobre lo que puede llegar a suceder", comentó Boerr.
Según Boerr, "todo indica que el gobierno va a presentar unas propuestas salariales y los policías tendrán que acercarse a negociar. En un par de días podría llegarse a un acuerdo y levantar la protesta". Recordó también antecedentes similares: "En 2012, hubo un acuartelamiento muy importante y en 2020 se trató de negociar rápido para evitar protestas prolongadas".
El periodista concluyó destacando la importancia de resolver el conflicto para mantener la seguridad: "Es muy peligroso tener policías enojados y con solidaridad del resto de la policía. Ellos aludieron a si los nos tratan mal, no va a ser solidario el trabajo de prevención".