Román Darío Paz González era un joven de 29 años que se metió en una pelea para intentar evitar que dos rugbiers golpearan a un trapito. Lejos de poder salvar a la primera víctima, a él también le pegaron y terminó agonizando dos meses hasta que murió.

La golpiza que dejó a Román al borde de la muerte ocurrió el 8 de junio de 2019. Ese día el muchacho volvía a su casa luego de trabajar a la noche en un bar del centro de la ciudad de Santiago del Estero.

Cuando llegó al cruce de avenida Roca y calle Jujuy vio una discusión entre tres sujetos. Cuando frenó vio que dos rugiers que estaban trompeando a un “trapito” que les pedía que le pagarn por el cuidado de su auto. Román intervino en la pelea, pero los agresores lo golpearon a él también hasta dejarlo inconsciente.

Lo golpearon fuertemente en la cabeza. Los médicos lo operaron dos veces, quedó paralítico, y agonizó más de dos meses en terapia intensiva, hasta que murió.

Los rugbiers violentos fueron apresados y tras algunos meses los condenaron a prisión en suspenso. La familia del fallecido se mostró indignada por este hecho, igualmente tienen fe en que podrán anular este juicio y pedir que los vuelvan a juzgar.

Yoana, la prima de Román, dijo: "Me parece vergonzoso la pena que le dieron a estos chicos por matar a una persona". Además, agregó: "Nos enteramos de la pena por los medios de comunicación, ni siquiera nos citaron". La mujer agregó que "hay posibilidades de anular el juicio y reabrir la causa”.

Fuente: Crónica