El caballo Milito ganó una carrera el 6 de octubre en el Hipódromo de Neuquén y de inmediato se desplomó y murió. De inmediato intervino la policía que realizaba guardias en el evento y dio intervención a la justicia que investigó el caso.

El veterinario de la división montada de la policía de Neuquén tomó muestras de inmediato de la sangre del animal  muerto para su análisis, estas determinaciones dieron como resultado que tenía cafeína, atropina, clembuterol y efedrina, según confirmó el fiscal Maximiliano Breide Obeid al diario La Mañana de Neuquén.

Otras de las actuaciones judiciales fueron los allanamientos que se realizaron ese mismo día en los vehículos de los responsables del caballo de carrera donde se encontraron, jeringas, sueros y al menos 30 frascos conteniendo diferentes drogas.

La justicia trabaja en el procedimiento para comprobar los delitos que pudieron haber cometido los sujetos señaladas por violación a la ley de protección animal, maltrato  y doping contra los mismos.

Fuente (La Mañana de Neuquén)