En la madrugada del viernes, un hombre causó destrozos significativos en el Hospital de Pinamar en Buenos Aires luego del fallecimiento de un familiar que estaba internado allí. Armado con un martillo, el agresor rompió puertas, ventanas, mamparas y otras estructuras de las áreas de quimioterapia, hemoterapia y oncología. Tras el incidente, fue detenido por la policía.

Según empleados del hospital, el hombre comenzó a destruir varias áreas del centro de salud en medio de una violenta escena que fue captada por las cámaras de seguridad. La directora asociada del hospital, la doctora Florencia Vivero, explicó que el ataque se desencadenó luego de la muerte de un familiar del agresor, un paciente de 74 años con antecedentes cardiológicos graves, que estaba esperando ser trasladado a un hospital de mayor complejidad.

El paciente había llegado al hospital con una arritmia severa. A pesar de los esfuerzos del personal médico, que logró estabilizarlo y colocarle un marcapasos transitorio, el paciente sufrió una nueva arritmia y falleció mientras esperaba un marcapasos definitivo, que había sido gestionado a través de PAMI Central. "Las demoras en los traslados a hospitales de mayor complejidad a veces no dependen de nosotros", explicó Vivero, resaltando las limitaciones del hospital para tratar casos de alta complejidad.

El ataque impactó gravemente en el funcionamiento del hospital, especialmente en los tratamientos de quimioterapia y las transfusiones de sangre. "Tuvimos que suspender las transfusiones y donaciones de sangre", lamentó la doctora Vivero del establecimiento. La Fundación Donde Quiero Estar, que colaboró en la ampliación y equipamiento de las salas de oncología y hemoterapia, también expresó su tristeza por el incidente, señalando que 12 quimioterapias programadas tuvieron que ser suspendidas.

Las autoridades locales han iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias del fallecimiento del paciente y el accionar del agresor. Mientras tanto, el hospital avanza en las reparaciones y en la reanudación de los servicios afectados. Los médicos han hecho un llamado urgente a la comunidad para que se acerquen a donar sangre, dada la escasez provocada por el ataque.