Este pasado 11 de diciembre, "la casa más famosa del mundo" volvió a llenarse de hermanitos ansiosos de ganar fama y los 50 millones de pesos que ofrece el premio mayor.

Desde sus comienzos, Gran Hermano se transformó en un programa de culto en la televisión argentina, más allá de las señales por las que el juego pasó y los conductores que ocuparon el púlpito del certamen de convivencia.

En esta nueva edición, Telefe eligió a 22 participantes heterogéneos que traen distintas historias de vida y que las redes comenzaron a comentar desde el minuto cero de la transmisión de 24 horas.