Este 11 de mayo, Gran Hermano cumple cinco meses de programa y, por esa razón, Santiago del Moro ingresó en la noche del jueves para sorprender a los participantes y llevar buenas noticias.

En un bloque de congelados, el conductor entró a "la casa más famosa del mundo", sin saludar y directo hacia el SUM, en donde esperó a los "hermanitos" con una cena de hamburguesas.

Con los habitantes del juego sorprendidos, el conductor les llevó a cada participante, dos fotos enviadas por sus familiares de distintos momentos en la vida de los habitantes del juego de convivencia y aislamiento.

La esperada prueba

Casi al finalizar la emisión en el canal de las pelotas, Del Moro anticipó a los jugadores que, el lunes 6, participarán por el esperado auto en una prueba sin precedentes.

Con un video, el mediático recordó el juego de la edición anterior, en donde Maxi fue el gran triunfador.