Familiares y amigos le dieron el último adiós a Antonio Gasalla
El capocómico descansa en paz en un exclusivo parque de Pilar, en Buenos Aires.
El espectáculo argentino despidió este miércoles a uno de sus grandes íconos. Antonio Gasalla, maestro del humor y la ironía, falleció a los 84 años dejando un legado imborrable. La despedida comenzó en el Teatro Maipo, escenario donde brilló tantas veces, y continuó en la casa velatoria Zuccotti Hermanos.
Pasadas las 10:30, el cortejo fúnebre partió hacia el Parque Memorial de Pilar. Seis autos y una comitiva reducida acompañaron sus restos en silencio. Al frente iba su hermano Carlos Gasalla, junto a familiares y amigos cercanos como Marcelo Polino, Alejandro Veroutis y el secretario de Cultura, Leonardo Cifelli.
La ceremonia en la capilla fue breve y emotiva. Se leyó un pasaje del Evangelio de San Juan y, como homenaje final, sonó la voz del propio Gasalla recitando el Soneto XV de Shakespeare. Los aplausos y las lágrimas sellaron el adiós.
A las 12:30, tras el entierro, Carlos Gasalla se retiró en silencio. Polino, visiblemente conmovido, recordó su última charla con Antonio días antes en el Sanatorio Otamendi: “Me dijeron que ya no hablaba. Le dije ‘feliz cumpleaños’, y me contestó: ‘Estoy muy bien, ¿y vos?’. Fue la última vez que habló”.
Gasalla, creador de personajes inolvidables como Mamá Cora y La Empleada Pública, deja como legado un humor ácido y profundo que retrató con maestría las contradicciones de la sociedad argentina.