Guillermo Gelves, fiscal, brindó detalles sobre las operaciones llevadas a cabo para frenar fiestas clandestinas en la jurisdicción. El último evento intervenido tuvo lugar el pasado domingo en Comandante Cabot, a pocas calles de Paulo Albarracín en Villa Santa Anita. 

Según Gelves, el operativo de la policía especializada se llevó a cabo en respuesta a tareas investigativas que identificaron un evento no autorizado. El fiscal resaltó que este tipo de intervenciones son esenciales, ya que estos eventos no cuentan con la debida autorización legal y representan un riesgo para la seguridad pública.

En el relato del fiscal, se detalló que la intervención policial se encontró con resistencia por parte de los organizadores y asistentes. La falta de colaboración por parte de la parte organizativa llevó a situaciones de violencia, incluyendo el arrojo de piedras. La rápida respuesta de las fuerzas policiales resultó en la detención de dos individuos mayores de edad.

Gelves señaló que en los últimos dos meses, han intervenido en un total de 17 eventos similares. Estos eventos clandestinos adoptan una nueva modalidad al presentarse como celebraciones de cumpleaños, pero con la particularidad de cobrar entrada.

El fiscal advirtió sobre la ausencia de medidas de seguridad y personal adicional en estos eventos, lo que potencialmente puede derivar en agresiones, peleas y daños a la propiedad privada. Afortunadamente, en este último operativo, no se reportaron daños significativos a los oficiales ni a los vehículos policiales debido a la rápida acción para controlar la situación.