En un juicio abreviado, Jorge Luis Quiroga, conocido en su barrio como “el trapito” que cuidaba los autos estacionados, fue condenado a un mes de prisión efectiva tras ser hallado culpable de hurto simple en grado de tentativa. La pena se unificó en una sentencia total de dos años y un mes de prisión, por lo que el imputado deberá cumplir la condena en prisión efectiva, sin posibilidad de excarcelación.

El hecho se produjo en las primeras horas del domingo, cuando la hija de una vecina de la zona llegó a casa de su madre y notó que alguien había entrado en un vehículo estacionado, mientras la alarma del auto sonaba en la cuadra. Según la testigo, en un principio pensó que se trataba de un niño, pero al acercarse identificó al hombre como el “trapito” que habitualmente cuida los autos en la misma calle. La mujer vio cómo Quiroga se retiraba del vehículo con una bolsa en la mano, la cual dejó en el hueco de un árbol en la esquina de las calles 25 de Mayo y Jujuy, antes de regresar a su puesto en la vereda.

La hija y la madre decidieron alertar al 911, lo que llevó a la intervención de efectivos del Comando Central. Los agentes inspeccionaron el lugar y, gracias a la información de la testigo, localizaron la bolsa con un par de zapatillas usadas y un estuche de maquillaje que Quiroga habría sustraído del vehículo. El propietario del auto, que se encontraba en un local de comidas cercano, fue contactado para corroborar la denuncia y avanzar con los procedimientos legales.

En el marco del sistema especial de flagrancia, el fiscal en turno decidió investigar el caso y, tras la aprehensión de Quiroga, la fiscal del caso, Dra. Paula Carena, gestionó un juicio abreviado que culminó con la condena a un mes de prisión. Sin embargo, la unificación de penas derivó en una sentencia final de dos años y un mes de prisión efectiva, medida que se hará cumplir de manera inmediata bajo prisión preventiva.