Este miércoles en Tribunales, se resolvió suspender el juicio a prueba por el término de un año, contra un sanjuanino de apellido Soria. Quien tras emborracharse en compañía de un vecino, agredió a su familia. En consecuencia, bajo la carátula de lesiones leves agravadas por el vínculo en contexto de violencia familiar le dieron además una prohibición de acercamiento y la imposibilidad de volver al hogar, una reparación simbólica a CUVHONI y trabajos no remunerados. El caso estuvo bajo la investigación judicial encabezada por la Fiscal Adriana Ginestar y el ayudante Fiscal Mario Quiroga.

El delito que el imputado cometió tuvo lugar el pasado 17 de Diciembre, en horas de la tarde. Soria estuvo tomando de manera desmedida bebidas alcohólicas en el frente de su domicilio junto a un vecino y al llegar la noche, cerca de las 21 según fuentes judiciales, comenzó a agredir a su familia. En principio ejerció violencia verbal, contra su pareja y madre de dos de sus hijos. Tras esta situación en que ambos comenzaron a discutir, la damnificada se dirigió hacia el dormitorio con uno de sus hijos, para resguardarlo.

Fue entonces que, alrededor de las 23, mientras la víctima se encontraba de pie al lado de su cama, Soria se le acercó por detrás, la tomó por la fuerza, la tiró a la cama y comenzó a violentarla nuevamente. Acto seguido, alertado por los gritos de la mujer y el pedido de ayuda por parte de uno de los hijos del imputado, un vecino ingresó a la casa para auxiliarlos. Sin embargo el agresor lo corrió de la vivienda y este se fue.

El nivel de agresiones continuó aumentando dentro del hogar, por lo que lo que inició en el cuarto se trasladó al comedor de la casa. El hombre la tomó del cuello, la tiró al suelo y la mujer se golpeó fuertemente su cabeza. No contento con haber reducido a su pareja en el piso, Soria continuó forcejeando y maltratandola, inclusive colocando su rodilla sobre el abdomen de ella a la altura del estómago. Esto sin quitarle las manos del cuello y amenazandola constantemente. Le decía ' Llama a la Policía, no le tengo miedo...'.

Mas adelante, ingresó al domicilio un vecino, quien logró tranquilar a Soria. Pero el agresor lo corrió y cerró la puerta con llave. Minutos más tarde, la víctima pudo llamar al 911 y cuando los uniformados llegaron a la vivienda, aprehendieron a Soria.

En razón de lo manifestado por la víctima, se la traslado a la sede de UFI Cavig a fin de que pudiera ser revisada por el Médico Legista y constatar las lesiones. Después la mujer realizó la denuncia correspondiente y se inició la causa en contra del agresor.