Cara a cara con su acosador: declaró la víctima de pornovenganza
Avanza el juicio contra el tatuador sanjuanino, Patricio Pioli, acusado de coacción y lesiones leves por difundir imágenes intimas de su ex. Hubo polémica en la primera audiencia.
En La Rioja, avanza el juicio por “pornovenganza” contra el tatuador Patricio Pioli, acusado de coacción y lesiones leves contra su ex pareja, Paula Sánchez Frega. La joven lo acusa de difundir sus fotos y videos íntimos.
Este caso podría sentar un precedente para crear una nueva figura en el Código Penal por los delitos de “pornovenganza y sexting”.
El pasado jueves se llevó a cabo la primera audiencia ante el tribunal integrado por los jueces Edith Agüero, María Petrillo y Fernando Romero.
Luego de la lectura de la declaración testimonial de Pioli en el proceso de instrucción, declaró la víctima, Paula Sánchez Frega.
Hubo una gran polémica porque la joven no quería declarar en presencia del acusado y la Querella pidió que Pioli siga el debate en otra sala. Sin embargo, la jueza Agüero, rechazó este pedido y pidió reorganizar la sala para garantizar la distancia y seguridad de la víctima al momento de su declaración.
Ante esta situación, la Querella solicitó que se incorpore por lectura la declaración en instrucción de la víctima, a lo que la defensa de Pioli, patrocinada por el abogado de vasta trayectoria, Juan Carlos Pagotto, se negó. "Me opongo que se incorpore por su lectura, porque para eso tiene su querellante particular, como fiscal privado, con una serie de derechos cuya interpretación la vamos a realizar en el alegato", manifestó el abogado. "Si no quiere declarar que no se le tome declaración y punto. Es un insulto al debido proceso, quiero que quede constancia de eso", agregó, según informó el diario Nueva Rioja.
Por su parte, el Tribunal resolvió rechazar el pedido de la Querella de incorporar la testimonial por lectura y le indicaron al abogado de la víctima, Sebastián Andrada, que haga comparecer a la mujer.
Finalmente, la joven declaró frente al imputado. Un grupo de policías hizo una especie de barrera para evitar el contacto visual entre la víctima y el acusado, según informaron medios locales.
Durante su testimonio, Sánchez Frega se mostró notablemente afectada y entre llantos relató lo que sufrió durante su relación con Pioli. Su testimonio recién se dará a conocer una vez finalizado el juicio, según prevé el artículo 415, a fin de no vulnerar el debido proceso.
En cuanto a la declaración del acusado, se leyó su indagatoria en la etapa de instrucción y sin la presencia de la víctima en la sala. En el mismo, manifestó detalles de su relación con la denunciante, como así también se reprodujeron audios entre ellos.
"Si no quitaba el me gusta de mis trabajos, me amenazaba con matarse. Ella decía que asistió a varios psiquiatras de la Provincia para tratar su enfermedad", dijo en esa oportunidad el acusado.
En ese escrito, Pioli relató que no quería dejar a Sánchez Frega: "Me dolía dejarla por su enfermedad". Sin embargo, "el 22 de abril (de 2016) le dije que me iba, le di un beso, me levante y me fui al estudio. A las 12 me llegó mensaje de Paula donde me dice que se va del departamento, que estaba cansada".
"Decido ir a la casa y terminar con la relación. Comenzamos a discutir por el mensaje y la amenaza que se iba a matar. Seguimos manteniendo contacto mediante mensajes y eso fue todo como terminó la relación", aseguró.
Ante las preguntas de la defensa en ese momento, Pioli respondió que hubo varios testigos de las situaciones de violencia entre la pareja. "Muchas veces hubo testigos, los dueños del lugar donde trabajo", indicó.
No obstante, aseguró que nunca la agredió físicamente y que tampoco la amenazó con divulgar sus fotos. Además, confirmó que su teléfono en ese momento fue sustraído de su lugar de trabajo. Y agregó que la denunciante ya había tenido problemas con otras parejas "por fotos pornográficas subidas a redes".
Si bien, Pioli, se negó a responder las preguntas de la Quererlla, respondió sobre los audios que presentaron como prueba las partes. En uno de ellos se escuchaba "Ay mirá hija de puta te voy a matar" (SIC), pero el tatuador aseveró: "no reconozco esa voz, no soy yo".
En el segundo audio se escuchaba "vos a mí me dañaste, te voy a hundir, te voy a destrozar la vida", pero el imputado negó nuevamente ser el del audio. "No reconozco, no sé quién es, no soy yo", advirtió.
"Lo único que quiero es que borres mis fotos desnuda", se escuchó en otro de los audios. El imputado negó que sea su voz y la de la víctima. "No es mi voz, no soy yo, no es ella, y parece que están editados esos audios", afirmó.
En otro sentido, Pioli reconoció la voz cuando las agresiones eran de ella hacia él sobre posteos en redes sociales. "Reconozco la voz, es ella, son amenazas que hacía diariamente" y continuó luego: "Como se escucha en el audio, son problemas que ella realizaba a diario por celos. Ella me agredía", sostuvo el acusado.
Los audios fueron aportados por la querella y defensa, y el Tribunal decidió la incorporación por lectura de lo declarado en instrucción.
El viernes, declararon otros testigos aportados por Fiscalía: el médico psiquiatra Sabino Antonio Luna; Aldana Brizuela Navarro y Agostina Herrera. El profesional fue quien asistió a la víctima antes y durante la relación con el acusado.
Este martes se llevará a cabo en horas de la tarde la tercera audiencia del juicio y se prevé la declaración de otros 4 testigos.