Angela Sabrina Pavoni fue condenada a un año y diez meses de prisión efectiva por cometer múltiples estafas mediante la venta fraudulenta de terrenos y vehículos en San Juan. La sentencia fue dictada en un juicio abreviado por la jueza Flavia Gabriela Allende, quien además ordenó la prórroga de su prisión preventiva hasta que la resolución quede firme.

Según la investigación del Ministerio Público Fiscal, Pavoni utilizó perfiles falsos en Facebook y WhatsApp para captar víctimas. Les ofreció terrenos inexistentes y vehículos a precios atractivos. En el caso de los terrenos, publicó anuncios en redes sociales con ofertas de lotes ubicados en distintas zonas como Rawson y Santa Lucía. Pactó encuentros con los compradores, los llevaba a los supuestos terrenos y les presentaba documentación falsa para generar confianza.

Luego, firmó boletos de compra-venta en domicilios particulares y exigía transferencias bancarias, pero cuando los compradores intentaban tomar posesión del terreno, descubrían que ya tenía dueño legítimo o que nunca estuvo en venta.

En otra de sus maniobras fraudulentas, ofreció un Fiat 147 en Facebook a través de un perfil falso. Acordó la venta con una víctima, le proporcionó un alias bancario para que realizara una transferencia de $1.550.000 y, una vez recibido el dinero, dejó de responder mensajes y bloqueó al comprador sin entregarle el vehículo. 

Además, se comprobó que Pavoni utilizaba diferentes nombres en redes sociales, como "Carolina Páez", "Estela Escobar" y "Ortiz Emilia", para atraer víctimas, y que los números telefónicos con los que concretaba las estafas coincidían en el registro del IMEI, lo que permitió vincularlos a ella.

 También se determinó que el dinero transferido por las víctimas terminó en cuentas a su nombre o de su cómplice, Dayana Ayelén Gallardo Pavoni, quien ya había sido condenada en otro juicio abreviado.

Finalmente, Pavoni fue acusada del delito de estafas reiteradas en concurso real, en perjuicio de varias víctimas. Deberá cumplir su condena en el Servicio Penitenciario Provincial y, tras su liberación, quedará bajo la supervisión del Patronato de Protección de Presos Liberados y Excarcelados.