Durante el pasado 15 de marzo en una casa del departamento Rawson se encontró el cuerpo sin vida de una adulta mayor. Desde ese momento surgieron las hipótesis de robo, de si se trató de una caída casual o si incluso se trató de un femicidio. Lo cierto es que después de 7 días y de todas las pericias realizadas, no se ha logrado individualizar a ningún sospechoso.

El cadáver de Rosalba Albarracín de 71 años fue encontrado en el comedor de su vivienda del barrio Cruz del Sur. En esa vivienda situada sobre calle Gobernador Castro, la mujer se encontraba boca abajo y con mucha sangre brotando de su cabeza. Si bien una de las posibilidades que existía es que ella hubiera caído en dos ocasiones debido a que se movilizaba sólo con un andador, esto se descartó.

Debido a que se encontraron lesiones en la parte posterior de su cráneo, se confirmó que alguien la golpeó. Esta situación, sumado al desorden que había en la habitación donde yacía Rosalba, llevó a los investigadores a definir que todo se trató de un robo. Sin embargo, a pesar de que a finales de la semana pasada detuvieron a un interno del Penal que cuenta con salidas transitorias como parte de la causa, el mismo fue desvinculado y todavía no hay ningún sospechoso concreto.

A raíz de este escenario, hay gran expectativa por la obtención de los resultados de las pruebas de ADN que se realizaron últimamente. Las mismas pertenecen al material genético que se encontró tanto en el cuerpo como en la ropa de Albarracín. A partir de esa definición, la causa podría volver a avanzar en la búsqueda de esclarecer lo ocurrido.