Sobre finales del pasado año 2021 un bioquímico sanjuanino realizó una denuncia en una comisaría de Jáchal. En la presentación aseguraba que había sufrido un robo millonario y que tenía un video donde se veía a los dos responsables. Estos supuestos ladrones fueron detenidos, estuvieron casi una semana privados de su libertad hasta que finalmente la filmación nunca apareció.

Quien realizó esta grave acusación fue Pablo Daniel Olivares. Este hombre había asegurado ante las autoridades que entre el 24 y el 25 de diciembre de 2021, dos hombres se habían colado en su vivienda ubicada en Rodeo. De esta vivienda se habían robado 400.000 pesos, aproximadamente 18.000 dólares, pulseras de oro, anillos, cadenas, una pistola, dos cajas de cartuchos, copias de llaves y la documentación de cuatro rodados.

Luego de esto, el propio Olivares pidió realizar una ampliación de la denuncia. En la misma aseguró que los malvivientes eran Matías Baigorrí, quien era el novio de su hermana, junto con un amigo llamado Carlos Ostinelli. Allí el fundamento que dio fue que las cámaras de seguridad los habían captado a ambos cometiendo este ilícito.

Debido a esto tanto Ostinelli como Baigorrí fueron detenidos y pasaron unos 5 días privados de su libertad al estar vinculados al hecho. Sin embargo esta supuesta grabación tan importante nunca apareció ya que, según el propio denunciante, su mujer habría metido por error al lavarropas el pendrive con la única copia. 

Al recibir esta declaración, las autoridades ordenaron un rastrillaje para determinar si el proveedor del sistema de cámaras u otra persona podría tener esta grabación. El resultado fue totalmente negativo. A esto se sumó que el geoposicionamiento de los celulares de los dos acusados, los ubicaban en otro lugar completamente distinto durante la hora que se dio el robo.

Esto motivó que finalmente Domingo Daniel Castro, juez de Jáchal, ordenara el sobreseimiento de estas dos personas. No obstante, tanto Baigorri como Ostinelli estuvieron desde el 17 hasta el 21 de febrero de 2022 detenidos e incomunicados sin haber cometido ningún tipo de delito.