En marzo de 2020, se produjo un accidente en San Juan protagonizado por un agente de la Policía llamado Alexis Damián Albaracín. En ese momento, Albaracín conducía bajo los efectos del alcohol y se dirigía a cumplir con su servicio de adicional en el Complejo Vela y Remo de Ullum. Sin embargo, perdió el control de su vehículo y cayó por un barranco de 10 metros.

Aunque afortunadamente el agente salió ileso, sus compañeros notaron que parecía estar borracho. Al realizarle un dosaje, se descubrió que tenía 1,64 gramos de alcohol por litro de sangre, lo cual superaba más del triple del límite permitido. Además, se constató que su licencia de conducir estaba vencida y que el vehículo no contaba con la Revisión Técnica Obligatoria (RTO).

Durante su defensa, Albaracín argumentó que el automóvil presentaba fallas mecánicas y admitió haber estado en una fiesta donde consumió cerveza hasta altas horas de la madrugada.

Tras llevar a cabo un sumario administrativo, se determinó que el agente merecía una sanción severa. Esta semana se dio a conocer un decreto provincial emitido por el Poder Ejecutivo, en el cual se establece la expulsión de Albaracín y su cese como miembro de la Policía de San Juan. Esta medida responde a la gravedad de sus acciones y al incumplimiento flagrante de las normas y responsabilidades propias de su cargo.