Tres policías comenzaron a ser investigados formalmente este martes a pedido del fiscal Renato Roca y el ayudante fiscal Cristian Gerarduzzi (UFI de Delitos Especiales), por haber actuado con negligencia en el manejo de dos presos cuando arribaban a Comisaría 34ta, facilitando así que uno de ellos zafara de la esposa que compartía con otro detenido, tomara carrera y se fugara luego de saltar una medianera, sin poder ser alcanzado por dos uniformados.

El sujeto que escapó, Jaim Exequiel Corbo Céspedes (18) aún no es recapturado. Los uniformados que están bajo la lupa por el delito de favorecimiento culposo de evasión son el agente que esa noche era chofer de la patrulla, Eric Moreno (30), el cabo primero que viajaba en el asiento del acompañante, Víctor Hugo Paradiso (36), y el agente Fernando Paco (29), que iba en el asiento de atrás con Corbo Céspedes y otro detenido de apellido Espejo.

Fue alrededor de las 21:45 del pasado 23 de agosto en la playa de estacionamiento de la seccional de Rivadavia cuando el joven zafó y se fugó. Según la investigación, Corbo Céspedes había sido condenado en Flagrancia el 13 de julio pasado, a 2 años de prisión de ejecución condicional (sin detención) por haber robado junto a cuatro menores los teléfonos a unos chicos en la Plaza Italia, en Capital. Volvió a caer el día que se fugó.

Fue cerca del mediodía de aquel miércoles, cuando le atribuyeron haber robado mercadería de un camión estacionado cerca de la seccional 34ta. Por la noche, fue trasladado con el otro preso para que los revisara el médico de la Policía y se escapó cuando volvían de ese trámite. Los mismos videos de la seccional mostraron que cuando el auto paró, Paco bajó con los dos presos amarrados con el mismo juego de esposas y luego sus compañeros.

Para Fiscalía el exceso de confianza y la negligencia con que actuaron se verificó en el hecho de que no debieron usar un solo juego de esposas para dos detenidos y, además, en que el chofer y el otro policía debieron haber ayudado al colega que venía con los presos, bajándose primero. La jueza Verónica Chicón le concedió a Fiscalía un plazo de 4 meses para terminar con la investigación en la que se definirá el futuro de los implicados.