Un hecho que suele quedar impune esta vez tuvo una resolución judicial: un hombre en situación de calle fue condenado por arrojar una piedra y romper la ventanilla de un colectivo de la Red Tulum. El episodio ocurrió en la intersección de calles Mendoza y Benavídez, y la rápida intervención policial permitió identificar al agresor y llevarlo ante la Justicia.

La fiscal Daniela Pringles, a cargo del caso, explicó en Canal 13, que el ataque se produjo luego de que el conductor del colectivo negara llevar de manera gratuita a una pareja que había subido al vehículo sin pasaje. “Pidieron a los pasajeros que alguien les pagara el boleto y, ante el silencio, solicitaron viajar sin abonar. Como el chofer se negó, descendieron del colectivo”, comentó la fiscal. Del mismo modo mencionó que: “A los pocos metros, el hombre arrojó una piedra que destruyó una de las ventanillas”.

El asiento junto a la ventana dañada estaba vacío, por lo que no hubo personas heridas. "En las imágenes recabadas, se ve cómo quedaron los vidrios desparramados sobre el asiento", detalló la fiscal.

La particularidad de este caso radica en que, a diferencia de otros ataques a unidades de transporte que suelen quedar impunes, el chofer logró identificar al agresor, quien fue detenido a solo dos cuadras del lugar gracias a la descripción brindada a un móvil policial.

“Esto nos permitió vincularlo directamente con el hecho e imputarlo por el delito de daño. Ya tenía una condena en suspenso, por lo que se logró una condena efectiva en esta oportunidad”, confirmó Pringles.