En las últimas horas Carlos Alberto Campodónico (49) fue trasladado bajo custodia desde la seccional 13ra al Hospital Marcial Quiroga por supuestas afecciones en su salud. En ese sentido la decisión fue tomada por el juez Federico Rodríguez, que es quien interviene en la causa que tiene aprehendido al ex coordinador del Museo Histórico Provincial Agustín Gnecco por presunta tenencia y distribución de pornografía infantil.

Según revelaron fuentes judiciales, el último sábado Campodónico fue sometido en la misma seccional a un examen médico luego de que su abogador defensor presentara un escrito en el que solicitaba atención médica por dolores estomacales, de cabeza y en el pecho. De este modo, el médico legista actuante indicó que el detenido sea evaluado por especialistas médicos en gastroenterología y que se le realicen además estudios de cardiología, neurología y oftalmología "para control y seguimiento de sus afecciones", expuso el profesional, y aconsejó que no continuara preso en sede policial.

Asimismo, durante ese día el juez Rodríguez ordenó el traslado "urgente" de Campodónico al Marcial Quiroga, para que sea examinado, medicado e internado, siempre bajo custodia policial.

Esta resolución por parte del magistrado no cayó muy bien en Fiscalía, ya que estos hablaban de que existen "tratamientos diferentes" para los imputados de acuerdo a su trascendencia pública o estatus social. De hecho la fiscal coordinadora de la UFI Anivi, Valentina Bucciarelli, dijo a Diario de Cuyo que "sorprende este tipo de mecanismos" porque "el trato de los imputados debe ser igual para todos".

Es que para la fiscal además existe otro grave riesgo: la posibilidad de que el imputado entorpezca la investigación, teniendo en cuenta que en ese lugar, (Hospital Marcial Quiroga) puede que esté menos controlado y en contacto con más personas que pueden oficiar de cómplices, por ejemplo, para lograr la destrucción de evidencia o el acceso a cuentas electrónicas.

Cabe destacar que Campodónico fue detenido en la noche del viernes 11 de junio en su casa de Rivadavia, tras el pedido de Bucciarelli y luego de que fuera notificada por un informe internacional que alertó que presuntamente tenía vínculos con el tráfico de imágenes de menores explotados sexualmente. Incluso en la audiencia inicial reconoció haber visto videos sexuales, pero dijo que "no traficó con ellos". De hecho, la primera vez que se sentó frente al juez estuvo cerca de acordar un juicio abreviado, pero luego no hubo pacto y el juez Rodríguez le dictó prisión preventiva por 6 meses, negando la posibilidad de cumplirla en su casa, como había pedido su abogado.