Este martes, se conoció el resultado de una pericia que se había realizado en ropa interior de la chica presuntamente abusada en el Colegio Luján. La misma arrojó que en la prenda hay sangre, la cual podría haber perdido la víctima al momento de ser ultrajada. En este sentido, la abogada Paola Ibáñez, quien defiende al acusado Lucas Salinas, afirmó que "vamos a insistir en la producción de la prueba que hemos aportado y que todavía no se ha realizado". 

Asimismo, agregó que "venimos pidiendo que se amplíe o que se nos muestre el total de la prueba del médico legista para poder corroborar la nuestra con esa y de ahí hacer nosotros una apreciación y pedir otra prueba si correspondiera, con esa no es suficiente". Por su parte, el abogado querellante Agustín Idemi señaló a este medio que "se detectaron rastros de sangre de la víctima en su prenda íntima, la cual fue aportada en el momento de la denuncia". 

"Se han registrado rastros hepáticos que no corresponden a sangre menstrual, por lo que provienen de otro tipo de lesiones. En principio no se ha encontrado material genético de otra persona, pero es lógico dado la mecánica del hecho denunciado. Lo habíamos adelantado nosotros desde un primer momento, que se detectara material genético ajeno debido a la mecánico. La sangre podría provenir de las lesiones que presentaba luego de ser revisada", remarcó. 

Y añadió: "Si bien no hubo desgarro en la zona, si se constataron daños en los genitales. Los rastros de sangre existieron y es de la víctima, si hay algunas pequeñas lesiones en los alrededores de esa zona pero no se ha detectado es desgarro himeneal que es lo que alega la defensa para cambiar la calificación. No siempre que hay un acceso carnal, hay desgarro himeneal y es importante tenerlo claro porque dependen de un montón de cuestiones anatómicas".